Las reclamaciones presentadas ante Kontsumobide por consumidores descontentos con una compra o con el servicio que les presta una compañía bajaron el año pasado un 10 % debido a que los ciudadanos hacen compras cada vez más responsables y a que la atención al consumidor también está mejorando.
GASTEIZ. Así lo han explicado hoy tanto el consejero de Salud, Jon Darpón, como el director de Kontsumobide, Xabier Legarreta, durante la presentación del balance de actividad del Instituto Vasco de Consumo.
Aunque no es la primera vez que baja el número de reclamaciones tramitadas por Kontsumobide, nunca se había producido un descenso "tan significativo", ha reconocido Legarreta.
El consejero de Salud ha hecho hincapié en que las personas cada vez consumen de manera más responsable y que, a su vez, las empresas vascas están cada vez más concienciadas sobre los derechos de los consumidores.
De las 21.221 reclamaciones de consumo que se presentaron el año pasado ante las oficinas de Kontsumobide, el 38 % se debieron a problemas con empresas de telecomunicaciones (telefonía e internet), un 10 % con la factura de la luz y el gas, y casi un 7 % con la compra de electrodomésticos, material informático y audiovisual.
En general, los consumidores reclamaron tras detectar irregularidades en la facturación, incumplimientos de contrato y deficiencias en el servicio prestado.
Casi el 43 % de las quejas tramitadas por Kontsumobide finalizó con acuerdo entre las partes aunque también se impusieron 108 sanciones a raíz de quejas de usuarios o tras llevar a cabo campañas de inspección.
Nuevamente, las empresas de telefonía móvil fueron las que acapararon la mayoría de las sanciones emitidas por el Instituto Vasco de Consumo.
Por territorios, el 59,71 % de las reclamaciones que tramitó Kontsumobide se plantearon en Bizkaia, el 26,94 % en Gipuzkoa y el 13,35 % en Araba.
A lo largo de 2015 el Instituto Vasco de Consumo ejecutó 4.017 inspecciones de control de mercado y ordenó retirar 9.216 unidades de productos, juguetes en su mayoría que no cumplían la normativa de seguridad europea.
Por otra parte, las acciones formativas gratuitas promovidas por Kontsumobide con el fin de sensibilizar e informar aumentaron el año pasado y en ellas participaron 83.552 personas.
Aunque los datos de 2015 son positivos, los responsables de Kontsumobide han abogado por seguir trabajando con las empresas que centran el mayor número de quejas para conseguir que mejoren la atención al cliente desde el momento en que un usuario plantea un problema, para evitar que acabe tramitando una reclamación formal.
Legarreta ha indicado que esta línea de trabajo está dando resultados y hay empresas que han conseguido reducir hasta un 40 % las reclamaciones de clientes sólo con atender de manera ágil una queja no formal.