ALMERÍA. Los investigados se han negado a responder a las preguntas formuladas esta mañana por el abogado de la acusación particular en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Huércal-Overa, aunque han admitido haber saltado sobre los lechones y haberlo grabado con el móvil, algo que han calificado como "una payasada".
Asimismo los investigados han negado hoy ante el juez instructor que esta acción causara la muerte de los animales.
El juez no ha adoptado medidas cautelares contra los jóvenes, D.A.A., de 19 años, y M.R., de 22, que han abandonado la sede judicial aunque permanecen bajo la condición de investigados en este procedimiento, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
El TSJA indica que la causa sigue en instrucción por la presunta comisión de los delitos de maltrato animal y daños.
El pasado lunes prestó declaración ante el mismo tribunal el responsable de la explotación porcina en la que tuvieron lugar los hechos, quien denunció lo ocurrido a la Guardia Civil tras tener conocimiento de la muerte de las crías de cerdo.
Los hechos investigados se remontan al 7 de enero, cuando los jóvenes se encontraban en el trabajo realizando el destete de los lechones y trasladándolos hasta otros módulos, informó la Guardia Civil.
Cuando los lechones se encontraban en el pasillo de traslado, cerraron el acceso y la salida, por lo que los animales quedaron encerrados, sin posibilidad de escapar.
En ese momento, y mientras uno de ellos grababa con su teléfono móvil, el otro joven presuntamente saltó al pasillo hasta en tres ocasiones "cayendo con todo su peso sobre los lechones", matando de esa manera a 19 cerdos, mientras que otros 53 quedaron malheridos y murieron posteriormente.
Los jóvenes distribuyeron la grabación de vídeo y días más tarde el responsable de la explotación porcina conoció el suceso e informó al Seprona de la Guardia Civil.