GASTEIZ. El consejero de Salud, Jon Darpón, el coordinador del Plan del Sida e Infecciones de Transmisión Sexual de Osakidetza, Daniel Zulaika, y la presidenta de la Comisión Ciudadana Antisida de Bizkaia, Marta Pastor, han comparecido hoy ante los medios de comunicación para analizar los avances conseguidos frente al sida.

Darpón ha explicado que mientras los avances logrados "son enormes en lo científico" y se está investigando una vacuna terapéutica (que sustituiría a las pastillas), en lo social persiste "el estigma" en torno a quienes padecen esta enfermedad.

Así, ha dicho que según las encuestas, el 55 % de la población no querría que un hijo suyo fuera al mismo colegio que otro con VIH cuando en la realidad no existe riesgo de contagio ya que los tratamientos con antirretrovirales eliminan esta posibilidad.

Pastor ha explicado que "el VIH se cuela en la sociedad" a través del sexo sin protección, de los consumidores de drogas intravenosas, de las prostitutas, sus clientes y de las personas inmigrantes en situación de exclusión, a las que es más difícil hacer llegar los mensajes preventivos.

Además, en el caso de este colectivo, ha denunciado que salvo en Euskadi, en el resto de España las personas inmigrantes en situación irregular "no pueden acceder a los tratamientos antirretrovirales".

Las ONG vascas que trabajan en el campo del sida activan un protocolo de acompañamiento a las personas inmigrantes cuando se detecta una nueva infección para garantizar que obtienen el tratamiento necesario a través de Osakidetza.

No obstante, tanto Pastor como el consejero vasco de Salud han pedido la derogación del decreto del Gobierno español que limita el acceso de estas personas a la sanidad pública.

En cuanto a la situación de la enfermedad, entre 2009 y 2014 el número de casos ha descendido un 26 % en Euskadi y el 48 % de las nuevas infecciones se transmiten a través de relaciones homosexuales.

La edad media de la persona que se contagia es de 37 años pero las ONG han detectado con preocupación que hay jóvenes menores de 29 años que contraen el VIH, quizás porque "no han crecido con el terror" con el que se veía el sida hace años, cuando contagiarse era "una sentencia de muerte".

El objetivo prioritario de prevención para Osakidetza sigue siendo el colectivo homosexual y ahí las ONG son "la punta de lanza" para trabajar con ellos la prevención.

Los niños y menores de edad infectados por VIH "prácticamente han desaparecido". Cada año se suele atender en Osakidetza a un niño o dos, que suelen ser inmigrantes, de madres que acaban de llegar a Euskadi o que no han accedido al sistema sanitario, ha apuntado Zulaika.

Darpón ha subrayado como uno de los mayores logros de Osakidetza el haber cortado la transmisión del VIH de madres portadoras a sus bebés a través del embarazo y el parto.

Osakidetza atiende actualmente a 6.000 pacientes seropositivos, de los que 9 de cada 10 están en tratamiento antirretroviral. Cada año se detectan alrededor de 150 casos nuevos, tres por semana.