2 Concha Lago

GASTEIZ? Pese a que la demanda en las farmacias vascas de la nueva vacuna contra la meningitis B se ha disparado en los últimos días, y aunque la mayoría de pediatras aconsejan inmunizar contra este meningococo, los expertos piden tranquilidad y hacen hincapié en que aunque graves, los casos diagnosticados cada año de esta enfermedad son muy pocos. De hecho, la CAV ha pasado de contabilizar un total de 39 casos de meningitis B en 2009 a nueve en 2014, prácticamente un 80% menos, según los datos de Epidemiología del Departamento de Salud.

Sin embargo, todos recalcan que la meningitis es una patología muy grave, que resulta letal en un 13 % de los casos, y casi siempre acarrea consecuencias catastróficas para los pacientes que la superan. Entre ellas, lesiones cerebrales, pérdida de audición o amputación de extremidades.

Javier Cerero, presidente de la Asociación de Pediatras de Bizkaia con Práctica Privada, hace hincapié, no obstante, en un dato que a veces pasa inadvertido: la edad de los afectados. “Casi siempre el número de casos en mayores de veinte años iguala o supera al de niños pequeños. La población adulta y los adolescentes también están en riesgo porque son el reservorio natural de la enfermedad. Si algún día queremos acabar con ella tendremos que vacunar a los adultos contra los meningococos B y C, y contra el neumococo (Prevenar)”, subraya poniendo otro punto de mira.

Sobre el debate en que estos días se hallan sumidos muchos padres sobre si comprar o no esta vacuna (de nombre Bexsero) en la farmacia ?cuesta 106,15 euros y se necesitan cuatro dosis?, Cerero lo tiene claro. “Yo informo a los padres que la vacuna tiene un 50% de probabilidades de proteger a su hijo de una meningitis, y les digo que si se lo pueden permitir, que se la pongan”, afirma. “Pero, por otro lado, si un padre no la quiere poner, también le digo que me parece bien porque el riesgo que corre es aceptable. Es una enfermedad lo suficientemente rara y hemos convivido con ella tanto tiempo que el riesgo que asume es pequeño”, indica.

Además, a su juicio, “la vacuna se vende con una eficacia del 70 o el 80% y tenemos un trabajo que se hizo aquí en 2013 que demuestra que su eficacia real es del 45%. El bichito es distinto según donde vivas, de modo que era difícil conseguir una vacuna que fuera eficaz en todas partes”, explica.

Con estos datos en la mano, Javier Cerero, comprende perfectamente la decisión de las administraciones sanitarias que han optado por no incorporar Bexsero en el calendario vacunal infantil oficial de las comunidades autónomas. “Me parece lógico que la Asociación Española de Pediatría promueva esta profilaxis y también me parece lógico que Osakidetza diga que no es necesario hacer una vacunación universal porque desde el punto de vista de salud pública no es una prioridad ni existe una situación de riesgo”, aclara Cerero.

Sin vacunación universal De hecho, el Servicio Vasco de Salud descarta la vacunación universal con Bexsero. Osakidetza argumenta que “aunque esta vacuna supone un importante avance en relación a otras vacunas frente al meningococo B disponibles en la actualidad, existen diferentes aspectos e interrogantes no bien conocidos relacionados con la efectividad de la vacuna, la persistencia de los niveles protectores de anticuerpos a medio y largo plazo o su trascendencia en la práctica clínica, que condicionan las recomendaciones de esta vacuna desde el punto de vista de la salud pública.

Asimismo, las autoridades sanitarias vascas no recomiendan la vacunación universal con esta vacuna en la población infantil y adolescente de la CAV ya que “no se dispone de información sobre la eficacia y seguridad en inmunodeprimidos y otros grupos de población especialmente vulnerables”. “Además, faltan datos de compatibilidad con algunas vacunas de calendario y sobre la potencial cobertura de la nueva vacuna sobre cepas circulantes en nuestro medio”, se señala.

Paradójicamente, y frente a lo que ocurre con la nueva vacuna contra la meningitis B, Cerero recomienda vacunar a todos los menores de tres años contra la gripe. “Escribo una carta a los padres aconsejando que vacunen a sus hijos pequeños, o con alguna enfermedad especial. La gripe puede ser una enfermedad grave en niños pequeños, y ocasiona más hospitalizaciones por neumonía en niños que en personas mayores de 65 años”, justifica. l