ASTROGA. No obstante, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha insistido hoy en que la investigación "sigue abierta" y que hay que esperar a la identificación definitiva del cadáver, que se hallaba en avanzado estado de descomposición, aunque "todo apunta a que se trata de la mujer estadounidense desaparecida".
Ni un solo indicio se tenía hasta ayer del paradero de Denise Pikka Thiem, desde que el pasado 5 de abril se perdió su pista cuando realizaba sola el Camino de Santiago a su paso por la provincia de León.
Ese día, domingo de Resurrección, envió un correo electrónico a una amiga en el que saludaba "desde Astorga" y anunciaba su intención de seguir su ruta hacia la localidad de El Ganso, puntos ambos de la ruta Jacobea en la provincia leonesa.
Fue la última noticia que se tuvo de ella, y desde entonces se desconocía su paradero sin que se registrara actividad alguna en sus cuentas bancarias y ni en las redes sociales, en las que se mostraba muy activa, por lo que la Policía sospechaba que podía haber sufrido algún tipo de agresión.
No obstante, en principio los investigadores consideraron un accidente como la hipótesis más probable de la desaparición de la peregrina, aunque esta vía perdió fuerza con el paso del tiempo, dado, además, que la zona en la que se perdió su pista es muy llana y no presentaba excesivas dificultades para su tránsito.
Fue entonces cuando apareció en escena el vecino de la zona que fue detenido ayer y que es el principal sospechoso de su muerte, ya que cambió en un banco de la comarca una cantidad ligeramente superior a los mil dólares cuando era público que carecía de recursos y que habitualmente recurría a los servicios municipales para subsistir.
Desde entonces estaba bajo vigilancia, según ha explicado hoy el ministro del Interior, que ha viajado a Astorga para seguir de cerca la operación y ha confirmado que con el paso del tiempo la hipótesis de que pudiese ser el responsable de la desaparición de la mujer cobró fuerza hasta que finalmente fue detenido ayer tras ordenar su arresto la titular del juzgado de instrucción número 2 de León.
La detención se produjo en un bar de la localidad asturiana de Grandas de Salime, en el suroccidente del Principado, a donde había huido alertado tras la reactivación de la búsqueda de la peregrina desde el pasado jueves con un operativo formado por más de trescientas personas de distintos cuerpos de seguridad y del ejército.
El sospechoso no ofreció resistencia, confesó que había matado a la mujer y afirmó que diría donde había escondido el cadáver, según han informado fuentes de la investigación.
Tras ser trasladado a Asturias en un helicóptero, sobre las 23.00 horas se halló el cadáver en una finca de su propiedad situada entre las localidades leonesas de Santa Catalina de Somoza y San Martín de Agostedo.
La ultima persona que vio con vida a Denise fue un peregrino italiano, Giorgio Candoni, ya que ambos pernoctaron en el mismo lugar, el Albergue San Javier, y al día siguiente fueron vistos por una pareja de peregrinas alemanas que mantuvieron una conversación con ambos en una terraza cercana a la catedral de Astorga.
La desaparición de esta mujer provocó una gran alarma social y durante cinco meses se ha desplegado una gran dispositivo de búsqueda que peinó palmo a palmo un gran tramo del Camino de Santiago a su paso por León.
Finalmente, se han cumplido las peores pronósticos y el cadáver de Denise, de 41 años, rasgos indo-asiáticos, 1,60 metros de estatura, entre 50 y 53 kilos de peso y cabello largo, liso y negro, que apenas hablaba español, fue hallado anoche en un recóndito paraje de la comarca de la maragatería.