MADRID. Aquejada de cáncer de colon, la actriz permanecía retirada de los escenarios aunque en los últimos años apareció esporádicamente en algún programa de televisión, fundamentalmente por cuestiones relacionadas con sus relaciones sentimentales o sus diferencias con Sara Montiel.

Nacida en Sevilla en 1932, en el barrio de Triana, bautizada como María del Dulce Nombre Díaz Ruiz, y de nombre artístico Marujita Díaz, fue una de las actrices más populares del cine español de los años 50 y 60, recordada por cintas como "La Revoltosa" o "La Cumparsita".

Cantante, "vedette", actriz de teatro, televisión y cine, Marujita debutó en la gran pantalla junto con Imperio Argentina en el filme "La Cigarra", en 1948.

Diez años más tarde y una quincena de películas después, el productor Cesáreo González la invitó a participar en unas "Semanas del cine español" por varios países. Y fue precisamente durante esta gira cuando conoció al que sería su primer marido, el venezolano Espartaco Santoni, con el que estuvo casada cuatro años.

Su segundo matrimonio, en 1964, fue con el bailarín Antonio Gades, del que se separó un año después. En 1982 el enlace fue declarado nulo.

Su más sonada relación la mantuvo con Dinio García Leiva, un cubano cuarenta años menor que ella, a quien conoció en 1999 durante un viaje a la isla, y con el que protagonizó rupturas y reconciliaciones en platós y revistas del corazón.

En su carrera profesional, entre sus películas más populares destacan "Dos angelitos negros" (1960), "Y después del cuplé" (1959), "La cumparsita" (1961) "Polvorilla" (1957), "Carmen Boom" (1971) y "Deseo Carnal" (1978).

Sin embargo, la cinta que le dio mayor fama, popularidad y algunos premios fue "Pelusa", que produjo ella misma, seguida de "La corista", en 1960.

Intérprete de canción española, revista, zarzuela o cuplés, entre sus temas más conocidos destacan "Soldadito español", "Banderita", "Mi jaca", "Madre, cómprame un negro", "Si vas a París papá", "Mama, cómprame unas Botas", "Al Uruguay" y "Carmen de España".

Será también recordada en los escenarios por su trabajo en obras como "La fierecilla domada", "Agua, azucarillos y aguardiente", "La verbena de la Paloma" o "De Madrid al cielo", y en televisión, medio en el que grabó uno de sus últimos papeles en varios episodios de la serie "Truhanes" (1993).