Rizando el rizo de la reproducción asistida, la jubilada embarazada de cuatrillizos y la mujer que ha sido madre de mellizos pero de padres distintos gracias a un proceso de fecundación in vitro en el que otra mujer donó sus óvulos, han desatado la polémica sobre si todo vale en las técnicas de fecundación. El fenómeno denominado como las madres-abuelas es ya un viejo conocido. En los últimos años, por ejemplo en Euskadi se ha multiplicado por cuatro el número de embarazos en mujeres que superan los 45 años. La ciencia lo hace posible, pero hay riesgos y límites. Por eso, los ginecólogos no realizan tratamientos de fertilidad por encima de los 50 años. Sin embargo, el caso de Annegret Raunigk, la mujer alemana de 65 años y madre de 13 hijos que está embarazada de 21 semanas y espera cuatrillizos ha dinamitado todos los esquemas. El embarazo ha disparado la polémica por parte de médicos y expertos, que consideran que tener hijos con más de 60 es “extremo” e “irresponsable”.
Jose Luis Neyro, pionero de la reproducción asistida en España y uno de los padres de la fecundación in vitro en el Hospital de Cruces en 1985, hablaba hace ya 25 años sobre el particular. “Entonces impartí un curso de doctorado asegurando que existen límites jurídicos, fisiológicos, médicos y también bioéticos”. “Aunque yo sea técnicamente capaz de dejar preñada a una señora de 60 años, hay que contar con la vida y el desarrollo del nuevo ser”, afirma.
En 1994 publicó también otro estudio que planteaba si había un límite en las técnicas de reproducción asistida por encima de los 40 años. Después de estudiar mucho este asunto y con una trayectoria dilatada, lo tiene claro. “No estamos aquí para hacer todo lo técnicamente posible sino lo bioéticamente aconsejable”, dice el ginecólogo. “Ahora mismo tenemos un 60% de resultados positivos en la fecundación in vitro y por encima del 69% de éxito en la donación de ovocitos. Quiere decir que a poco que una señora se obstine, en dos o tres ciclos se lleva un niño a casa. Pero ¡cuidado! vamos a estudiar sensatamente a qué nos enfrentamos y qué tipo de vida vamos a dar a ese niño. La libertad individual de una mujer para hacer de su maternidad lo que quiera no debe estar en disonancia con lo que la naturaleza y la sociología aconsejen. Nuestras decisiones tienen unas consecuencias que en el futuro pueden volvérsenos en contra”, afirma categórico.
Otros expertos inciden también en que la gestación y el parto a partir de los 45 es de alto riesgo. Por ello se adoptan medidas especiales encaminadas a que una gestación plagada de problemas llegue a buen puerto. Los bebés también corren sus riesgos. Por ejemplo, la tasa de que padezca síndrome de Down en los casos de mujeres menores de 30 es de 1 de cada 1.000, en las de 40 aumenta hasta 1 de cada 100 y más allá de los 44 se dispara a uno de cada catorce.
No hay que olvidar que tras este tipo de embarazos se esconde un vía crucis de pruebas, ensayos y decepciones, los correspondientes a la reproducción asistida ya que, pasados los 35, las posibilidades de concepción de forma natural caen en picado. Si el embarazo de la mujer berlinesa llega a buen término, esta profesora de ruso e inglés a punto de jubilarse, se convertiría en la madre de cuatrillizos de más edad en todo el mundo. En el último año y medio, se sometió a varios tratamientos de reproducción asistida en el extranjero, tanto con óvulos como con esperma de donantes.
El ginecólogo bilbaíno José Luis Neyro asegura que en edades extremas, las sociedades científicas sugieren establecer contactos con profesionales de la psicología en orden a establecer perfiles psicológicos. Sin embargo, se niega a acusar ni a pacientes ni a profesionales. “Lo que digo es que esos profesionales y esos pacientes no han valorado a futuro las consecuencias de sus decisiones. Y cada uno de nuestros actos tiene continuidad en el tiempo”, dice también en alusión a la mujer que dio a luz a mellizos pero de padres distintos gracias a un proceso de fecundación in vitro en el que otra mujer donó sus óvulos en Tel Aviv. El proceso de gestación que comprende a dos hombres y dos mujeres, fue llevado a cabo fuera del país dado que las leyes del país hebreo prohiben tal práctica.
Edad. La Comisión Nacional de Reproducción Asistida recomienda a las clínicas privadas que no realicen estos procesos a mujeres mayores de 50 años por el riesgo sanitario que supone.
15.000
Cada año nacen en España más de 15.000 niños por reproducción asistida. Cerca de siete mil lo hacen por fecundación in vitro.