BILBAO. De esta forma, se ha permitido que los varones afectados por infección por VIH o hepatitis tengan una descendencia, evitando la transmisión del virus a sus parejas y a sus futuros hijos/as.
La técnica se puso en marcha en 2006 y desde entonces se han tratado a 90 parejas, de las cuales 70 se han sometido a inseminación y de ellas 43 mujeres se han quedado embarazadas.
El Hospital de Galdakao es la referencia para este campo desde que en 2006 Osakidetza comenzara a ofertar esta técnica. En concreto, es un proceso de aislamiento de espermatozoides móviles a partir de muestras de semen infectadas por virus de transmisión sexual, como VIH o el virus de la Hepatitis C.
La técnica elimina el virus que pueda estar presente en el plasma seminal o en cualquier otra célula potencialmente infecciosa, aislando los espermatozoides útiles que serán utilizados para técnicas de reproducción asistida.
Las técnicas de reproducción asistida nacieron para dar respuesta a las parejas infértiles, pero actualmente pueden aplicarse para evitar la transmisión de enfermedades infecciosas (es el caso de hombres con infección por VIH que emplean sistemáticamente el preservativo para evitar el contagio de sus parejas)
El doctor José María Aritzeta y la doctora Carmen Mar, facultativos del Hospital, han explicado que en su inicio en 2006, el número de parejas que demandaban esta técnica era elevado.
Ahora, gracias a la prevención del VIH y al avance en los tratamientos farmacológicos de esta infección, la necesidad del lavado o procesado seminal en parejas serodiscordantes (un solo miembro infectado) es menos frecuente.
Sin embargo, Osakidetza va a seguir prestando este servicio a las personas que recurren a este método para facilitar embarazos sin infecciones.