vitoria - El número de pobres crece en Euskadi. Es una realidad que, más allá de lo que se ve cada día en la calle y en los servicios de atención social, está confirmada por los datos. Las personas y familias en situación de pobreza y ausencia de bienestar han aumentado un 41,1% en los últimos cuatro años y suman 247.954 personas; entre 2008 y 2014 la tasa de pobreza real ha pasado del 4,8% al 5,9% de la población y ya hay 127.400 ciudadanos pobres -un 42% más que en 2008-, al tiempo que se reduce el grupo de personas en situación de completo bienestar.
La encuesta de Necesidades Sociales 2014 Módulo EPDS-Pobreza “dibuja un empeoramiento generalizado de la situación de los hogares vascos como consecuencia de la crisis”, reconoció ayer el consejero de Empleo y Políticas Sociales, Juan María Aburto, en el Pleno monográfico sobre paro y pobreza en el Parlamento Vasco. Aunque matizó que “gracias al esfuerzo solidario que realiza la sociedad vasca para luchar contra la exclusión, ésta cuenta con una red de protección social que la hace ser menos permeable al impacto de la crisis económica que otras de su entorno”. En este sentido, Aburto destacó que el sistema de garantía de ingresos llega en la actualidad a un 72,9% de la población en riesgo de pobreza y que el acceso a las ayudas ha facilitado la superación de la situación de pobreza real a 80.499 personas -un 3,7% de la población de la CAV y el 38,7% de las personas en riesgo de exclusión-. No obstante, el consejero detalló que hay más de 71.000 personas que no consiguen salir de la pobreza a pesar de que han accedido a las prestaciones y que este segmento de población es un 10,4% superior al que había en 2012 y un 68,6% más que en 2008.
El estudio del Gobierno Vasco va en la linea del informe Foessa sobre exclusión social presentado el jueves por Cáritas Euskadi, aunque en algún caso incrementa la cifra de personas en peor situación y añade el concepto de “movilidad descendente”. Esto supone que por primera vez desde que se realiza este estudio, puede decirse que en Euskadi se está produciendo un predominio de la movilidad social descendente , un hecho que se materializa en la reducción del grupo de personas en posición de bienestar casi completo, al tiempo que aumenta la desigualdad en la distribución de los ingresos y crece el grupo de personas más desfavorecidas.
menos bienestar Según la encuesta detallada por Juan María Aburto, ahora hay 13.000 personas más que hace dos años en situación de pobreza y 37.700 más que al comienzo de la crisis -lo que supone un aumento del 42%-, mientras que quienes sufren alguna forma de ausencia de bienestar se elevan a 250.000. Los 127.400 pobres estimados por el estudio padecen situaciones de “insuficiente cobertura” de sus necesidades básicas y conforman un colectivo que se ha ido incrementando progresivamente desde 2008. En cuanto a su distribución territorial, en Araba el porcentaje de personas en situación de pobreza se ha duplicado desde ese año hasta situarse en el 8,2% de la población, en Bizkaia también se supera la media de la pobreza del País Vasco con el 6,4% de la población, mientras que en Gipuzkoa, que es el territorio con menor porcentaje de pobres, también ha aumentado y ha pasado del 2,5% de 2008 al 4,2% en 2014.
Otro dato preocupante es que entre 2012 y 2014 las situaciones de pobreza real entre menores de 14 años avanzan a mayor ritmo que en el resto de la población. Ahora la tasa de pobreza infantil está en el 11,2% tras haber crecido casi 4 puntos desde 2008.
Ante unos datos que evidencian un claro deterioro del nivel económico de los hogares vascos y un incremento de las situaciones de riesgo de pobreza, el consejero reconoció que Euskadi es más pobre y desigual que en 2008, pero “mucho menos” de lo que sería si no se hubiera apostado por mantener el sistema de garantía de ingresos, sobre todo la Renta de Garantía de Ingresos (RGI). Sobre el impacto positivo del sistema de ayudas sociales, Juan María Aburto señaló que “es evidente que podemos mejorar nuestro sistema de protección pero si a algo ha contribuido nuestro sistema de garantía de ingresos es a que aún nos podamos ver como una tierra de oportunidad”.
Según los datos que aportó, el 4% de los ciudadanos nacidos en Euskadi está en situación de pobreza real, un porcentaje que alcanza al 19,4% de los extranjeros nacionalizados y a un 36,2% del resto de inmigrantes. “Algunos -dijo ayer Aburto- sentirán la tentación de resolver el problema de la concentración de la pobreza en la población extranjera forzando su salida de Euskadi”, pero señaló que esta solución no es solo “inaceptable” en términos éticos y de solidaridad, sino que tampoco es viable desde un punto de vista económico. “Una sociedad como la vasca no puede permitirse el lujo de renunciar a integrar a todos los que viven en ella; necesita de todas sus fuerzas para hacer frente al reto del envejecimiento de nuestra población”. El consejero añadió que la aportación de los inmigrantes “es también una condición de nuestra propia supervivencia como sociedad”.
Pobreza. La pobreza real en Euskadi alcanza en 2014 al 5,9% de la población, es decir, a 127.400 vascos, porcentaje superior al 4,2% de 2008 y al 5,3% de 2012.
Bienestar. Además, en Euskadi hay otras 120.000 personas en situación de “ausencia de bienestar”, un 16% más que hace dos años. En total 250.000 personas que residen en Euskadi padecen alguna forma de “ausencia de bienestar”.
El 4% de los vascos nacidos en Euskadi está en situación de pobreza real, frente al 19,4% de los extranjeros nacionalizados y al 36,2% de inmigrantes.
Un 64,3% de las situaciones de pobreza real corresponden a tres tipos de hogares: los hogares de personas extranjeras procedentes de fuera de la UE (33,1%), los grupos familiares de menores de 45 años sin ocupación estable (18,1%) y las familias en las que el titular sin ocupación estable tiene más de 45 años (13,2%).