son los años que duró el dictador desde que se levantó contra la voluntad popular en 1936 y casualidad su heredero ha durado también 39 años desde que se puso la corona, por encima de su padre en 1975, una casual casualidad que nos podía llevar con Felipón, sin acritud, hasta el 2053? y que con salud, lo veamos.

Pues sí, ya tienen los españoles un nuevo rey, Felipe VI, digno hijo de su padre. Uno, por eso de que la esperanza es lo último que se pierde, esperaba algo más, no sé, pues un poco de alegría o un cambio de rumbo como, por ejemplo, está intentando dar el nuevo Papa Francisco o los primeros intentos de Obama para modernizar EEUU. Pero no, Felipe VI dio una chapa digna de su padre; vamos, que se la redactó el mismo que le escribía a su padre los discursos. De ahí mi licencia en llamarle Felipón, por el tostón, al igual que llamábamos a un profesor de Historia infumable, aburrido y pesado que tuvimos en aquellos maravillosos años de instituto donde leía la Historia mirando al techo con el mismo volumen y entonación que una novena.

No es que sea yo monárquico ni un acérrimo republicano, aunque me encanta que en casa me traten como a un rey, comer como un rey, dormir como un Rey, pagar como un rey y hacer cosas innombrables como hacen los reyes. Por eso veo con la misma envidia que nos mira un senegalés que le tocó nacer allí, a un tipo de mi misma edad que nació del vientre de una mujer que casó bien con un hombre al que un dictador eligió como rey.

Esperaba más de Felipe, lo reconozco; como decía, es un tipo de mi edad y simplemente por eso esperaba nuevos aires, apertura de puertas y ventanas. Ya dio un importante paso al casarse con la que no le correspondía con su rango de futuro rey para ahora hacer de Tancredo y leer un discurso propio del pasado casposo de la corona española; menos mal que no dijo eso de "me llena de orgullo y satisfacción?". Flojo, Felipe, muy flojo para el Estado que heredas, para la corona que heredas y un pueblo al que ya no encandila eso de la monarquía.

Muchos presumen de lo bien que estás preparado, será porque te han preparado a imagen y semejanza de lo que ellos querían, una aburrida continuidad de lo que tu padre hizo, me refiero a nivel institucional, no lo que en su vida privada disfrutó, que en eso sí que parece que el padre es bastante más aventajado que el hijo? ya veremos.

De padres gatos, hijos michines o de raza le viene al galgo, se suele decir, pues de momento, mismo traje, misma parafernalia, mismo decorado, misma paliza de discurso para no decir nada nuevo. ¡Ay Felipón, esperaba algo más de ti!, por lo menos algo de sangre y de reivindicación de los que nacimos en la última parte del baby boom, ésos que nos comimos los últimos años de mili o de objeción, ésos que estábamos 45 alumnos en clase, ésos que sufríamos los números clausus en las universidades, ésos que cuando acabamos la universidad ya no había ni oposiciones para hacer ya que nuestros hermanos mayores habían copado toda la nueva Administración, ésos que nos enfrentamos a la gran crisis de los 90 sin experiencia, ésos que pagamos las casas más caras, ésos a los que la droga nos quitó grandes amigos?, ésos que son de tu edad pero que tú desde tu privilegiada y no ganada atalaya ni los viste, ni los viviste, ni los sufriste, así que, qué carajo de aire nuevo vas a dar a la vetusta corona que te ha tocado llevar.

No sé si a los españoles les darán la posibilidad de elegir algún día entre el borbonato o la República. A mí esta situación me da entre pena y pereza al pensar que hay que aguantar a otro Borbón los próximos 39 años. ¡Viva el Vino!