Euskaldun, participativa, autónoma, responsable, enraizada en su entorno, laica y con los mejores recursos, en constante innovación para elevar sus estándares de calidad ayudando a todos y cada uno de sus alumnos a dar lo mejor de sí mismos. Es la escuela pública vasca que desea para el presente y el futuro la Confederación de Padres y Madres de la Escuela Pública Vasca. Un modelo "vertebrador del sistema", según el presidente de EHIGE, Carlos López, que además de los recortes derivados de la crisis deberá enfrentarse a otra prueba: la entrada en vigor de la polémica Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa, Lomce. "No queremos frenar nuestra escuela y tampoco vamos a permitir que nadie lo haga", aseguró con rotundidad en el transcurso del 23º encuentro anual de Escuela Pública Vasca celebrado en Balmaseda. Los anfitriones, la Escuela Mendia, brindaron un caluroso recibimiento a las miles de personas que compartieron una jornada festiva y reivindicativa a partes iguales con una asistencia que "ha superado ampliamente las previsiones de la organización", según EHIGE. El lehendakari y la consejera de Educación, Cristina Uriarte, también quisieron apoyar con su presencia un modelo que "hemos construido entre todos durante más de tres décadas y queremos seguir fortaleciendo", según destacó Iñigo Urkullu en un gesto que la Confederación de Padres y Madres de la Escuela Pública valoró "de forma muy positiva". Si la aprobación de la ley Wert y los efectos de su inminente aplicación en las aulas inquietan a la comunidad educativa, el Gobierno vasco aboga por anteponer a la Lomce "trabajo conjunto, tranquilidad e inteligencia, ya que tenemos todas las herramientas para hacerle frente". El lehendakari expresó ayer en Balmaseda su rechazo "a las medidas unilaterales y a que la Educación se utilice como arma arrojadiza y por eso actuaremos con responsabilidad y determinación, pensando en las personas".

Euskera en la calle Pese a la incertidumbre por el nuevo marco legal y el contexto económico, desde el colorido que inundó el casco histórico de Balmaseda hasta la pegadiza melodía de la banda sonora de la Fiesta de la Escuela Pública -interpretada por el grupo local Siroka con letra del bertsolari encartado Aitor Arrutia- todo invitaba a la multitud a disfrutar del programa que la Escuela Mendia ha confeccionado en el último año en un marco incomparable bajo un lema muy optimista: Gorantz goaz, go, go! "La oportunidad de dar a conocer nuestro municipio es inmejorable", se felicitó el alcalde, Álvaro Parro. Al mismo incidió en que "tenemos pasado, presente y futuro y ahí la educación tiene mucho que decir". Profesores, alumnos y AMPA del centro organizador de este año han procurado que el euskera goce de un protagonismo destacado en una comarca con ciertas dificultades para arraigar la lengua vasca fuera del horario lectivo. Los payasos Pirritx, Porrotx y Marimotots llenaron la plaza de San Severino con su espectáculo Bizipoza, mientras decenas de niños bailaban al ritmo de DJ Xaibor en San Juan. Allí, bajo el pórtico de la antigua iglesia y actual Museo de Historia de Balmaseda, once voluntarios supervisaron el proceso de cocción a fuego lento de 21 putxeras. "Hemos traído sesenta kilos de alubias, de los que calculamos que saldrán unas 500 raciones", contaron los hermanos Aretxederra, José Martínez Orio y Manu Pereda, cocineros, "para potenciar la escuela pública en la que en su día también estudiaron nuestros hijos".

A pocos metros, la cola para deslizarse en tirolina por el Kadagua no dejaba de crecer. Al otro lado del río Eugenio y Emma observaban a sus hijos. "Aunque coincida con el Ibilaldia, hemos optado por esta fiesta, para apoyar lo público", argumentaron. Fútbol, ciclismo, tiro con arco y talleres culturales entretuvieron durante todo el día a mayores y pequeños en las cuatro zonas.