DONOSTIA. Las intensas lluvias caídas en las últimas horas han causado algunas inundaciones en garajes y portales de los barrios de la ribera del Urumea, en Donostia, aunque, a falta de una hora para la pelamar, no se han registrado incidentes graves, ha informado el Ayuntamiento.
El nivel del río ha llegado hasta los 4,4 metros a las 7.00 horas, pero finalmente no ha sido necesario evacuar a los vecinos de Martutene y Txomin, que a primera hora han sido alertados por SMS y a través de megafonía de la situación de alerta naranja en la que se encontraba el río.
Las únicas personas evacuadas han sido los ciudadanos rumanos que viven en un campamento entre Hernani y Astigarraga, en una zona inundable, quienes han sido trasladados a la 1.00 al polideportivo de esta última localidad, ha informado el Departamento vasco de Seguridad.
A primera hora de la mañana, cuando más ha subido el nivel del Urumea, se han inundado varios garajes del barrio de Martutene y varios portales de Okendotegi, por lo que se han utilizado bombas de achique.
Además, ha entrado agua en el pasadizo subterráneo frente al Polígono 27, lo que ha obligado a cortar el tráfico, aunque la situación ya se ha restablecido.
El consistorio donostiarra prevé que el nivel no siga subiendo, pese a que la pleamar será a las 10.47 horas de esta mañana.
El Ayuntamiento de Donostia ha reunido a la mesa de crisis para activar el plan contra inundaciones a la 1.00 y minutos antes de las 4.00 se ha avisado a los vecinos de las zonas inundables para que retirasen sus vehículos de bajos y garajes y los trasladasen al aparcamiento del centro comercial Garbera, una zona alta de la ciudad.
El Ayuntamiento ha habilitado un autobús lanzadera para trasladar a los vecinos desde Garbera a sus domicilios. En total, el autocar ha bajado a 49 personas en 7 servicios desde las 3.55 horas.
Otros tres coches, cuyos propietarios no los han movido de las zonas inundables, han sido retirados por grúas.
A partir de ahora, los vecinos serán avisado a través del servicio de mensajes telefónicos de cuándo podrán acudir a por sus vehículos.
El consistorio había habilitado dos puntos de encuentro en Martutene y Loiola para atender a los posibles afectados, pero finalmente ninguna persona ha acudido porque las lluvias no han causado ningún incidente grave.
Pese a ello, se mantienen todos los dispositivos de alerta y continúa reunida la mesa de crisis, que preside el alcalde, Juan Karlos Izagirre, quien ha acudido en dos ocasiones a la zona para conocer de primera mano la situación, ha informado el Ayuntamiento donostiarra.
