madrid. El 57% de los accidentes con víctimas (fallecidos y heridos) se produce en las ciudades, donde la siniestralidad desciende en menor proporción que en las vías interurbanas y donde el uso del casco, el cinturón de seguridad o los sistemas de retención infantil es menor que en las carreteras.
Por ello, la Dirección General de Tráfico (DGT) reunió ayer a alcaldes de 68 municipios donde se ha detectado una mayor siniestralidad para coordinar medidas que mejoren la seguridad vial en las calles de los municipios, especialmente de los que cuentan con más de 100.000 habitantes. Y aunque cada ciudad tiene sus peculiaridades en esta materia, la directora general de Tráfico, María Seguí, cree que deben adoptarse medidas generales para esa mejora de la seguridad vial, como la reducción de la velocidad máxima en las calles -hasta 20 ó 30 kilómetros por hora-, algo ya previsto en el borrador del nuevo Reglamento de Circulación.
Además, y ante la constatación de que los elementos de retención se usan menos dentro de los cascos urbanos, la DGT insta a los ayuntamientos, policías municipales y agentes de movilidad a que contribuyan a la concienciación de sus ciudadanos para que utilicen el casco en moto y bicicleta, el cinturón de seguridad y las sillitas infantiles.
Tal y como reflejan los datos de Tráfico, en zona urbana se registra el 24% de los fallecidos en accidente de circulación, el 42% de los heridos graves y el 55% de los leves, con una tendencia al alza en los dos últimos años. Además, el 62% de las víctimas mortales son peatones.
Se ha observado también un menor ritmo de reducción de la siniestralidad en las vías urbanas, ya que la tendencia de descenso desde 2003 es de entre 1,4 y 3 veces inferior a la mejora registrada en las interurbanas.
