Roma. El presidente del Gobierno italiano, Enrico Letta, anunció que a partir de hoy se enviará una fuerza militar de carácter humanitario para patrullar el Mediterráneo y evitar así más naufragios de barcos de inmigrantes. El anuncio coincide con los testimonios de varios supervivientes de los últimos naufragios de buques cargados de inmigrantes que denunciaron que las autoridades libias habían disparado contra ellos al zarpar de las costas norteafricanas.
El primer ministro italiano anunció el envió de militares durante su participación el sábado por la noche en un acto organizado por el diario La Repubblica. "Puedo anunciar que desde mañana [por hoy] una fuerza militar-humanitaria, naval y aérea, será enviada para hacer más segura esta parte del Mediterráneo que en estos días se ha convertido en una tumba", dijo Letta.
Según las indicaciones del primer ministro, se triplicará la presencia actual de las unidades navales en dotación en el Canal de Sicilia. No obstante, se trata de una medida temporal a la espera de una eventual intervención más amplia por parte de la Unión Europea. Y es que los líderes de la UE discutirán la actual crisis migratoria durante la cumbre de jefes de Estado y de gobierno que se celebrará los próximos días 24 y 25 de octubre en Bruselas.
Letta explicó que es necesaria una intervención inmediata y que "no puede esperar para abril o marzo", pero subrayó que después Italia expondrá a la Unión Europea que es imprescindible revisar el Convenio de Dublín. El primer ministro italiano hizo notar que Frontex -la agencia Europa para la gestión de fronteras- tiene su sede en Varsovia y que da la impresión de que "se ocupa sólo de una parte de las fronteras y no de las del mar".
Una ley polémica Letta también aseveró que no comparte la actual ley sobre inmigración italiana, la polémica Bossi-Fini, que entre otras cosas tipifica como delito la inmigración ilegal y que la aboliría. Sin embargo, el partido Pueblo de la Libertad, que forma parte del Gobierno de coalición, defiende la ley. No obstante, Letta explicó que necesita "una nueva legislación en materia de asilo" pues el tema clave es cómo acoger a los refugiados que llegan desde estados como Siria. Se debe garantizar el derecho de asilo y "en el Mediterráneo debe garantizarse de una manera diferente que en el resto de Europa", añadió.