LLEIDA. Los hechos sucedieron a última hora del lunes en un piso de Tàrrega en el que la joven vivía con su familia y al que acudió su ex pareja, de nacionalidad dominicana, con el que, al parecer, había roto recientemente.
La menor, que estaba sola en la vivienda, recibió presuntamente por parte de su agresor varias cuchilladas que le causaron la muerte. A continuación, el joven se dirigió a la comisaría de los Mossos d'Esquadra y se entregó a la policía.
El juez de instrucción ha decretado el secreto de sumario en relación con la muerte de la menor, que se ha convertido en la víctima más joven de un ataque de violencia de género en lo que va de año, según han confirmado a Efe fuentes del Instituto Catalán de la Mujer.
Por su parte, la subdelegada del Gobierno en Lleida, Inma Manso, ha reflexionado sobre la edad cada vez más joven de las víctimas de este tipo de delito.
"Que cada vez sean chicas más jóvenes nos tiene que hacer reflexionar en que la concienciación y la prevención son importantes. Hay que trabajar día en día en este sentido tanto con los hombres como con las mujeres y sobre todo con las de corta edad, porque las niñas con 14 años quizás no ven los problemas y las dificultades que las personas más mayores sí vemos", ha señalado.
La joven asesinada pertenecía a una familia muy conocida de Tàrrega, nieta de un profesor de instituto local y sobrina de un concejal del municipio cercano de Ciutadilla.
Por su parte, su presunto agresor es hermano de otro joven de 22 años que ha sido recientemente condenado a 12 años de cárcel por tentativa de homicidio, al haber apuñalado a dos hermanos tras una discusión en una fiesta de fin de año celebrada en un pub de Tàrrega en 2012, según ha indicado la alcaldesa de la localidad, Maria Rosa Perelló.
Tras conocerse el suceso, no han cesado las muestras de repulsa y de pésame ante este nuevo caso de violencia machista.
Una de las primeras ha llegado del Ayuntamiento de Tàrrega, una población que apenas supera los 16.000 habitantes y cuyo consistorio ha convocado hoy un pleno extraordinario para condenar el crimen y ha llamado a un minuto de silencio, que ha reunido a mediodía a unas 2.500 personas.
A la concentración, que ha tenido lugar en la Plaza Mayor, han asistido numerosos alumnos de los colegios de la población, y algunos de los estudiantes, entre ellos amigos de la víctima, han llevado pancartas en las que se podían leer mensajes como "No confundamos amor con posesión".
El Govern de la Generalitat, al igual que otras instituciones, ha condenado el asesinato y ha reiterado que la lucha contra la violencia de género y su erradicación es una de sus prioridades.
Ante lo sucedido, la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, ha hecho un llamamiento a las mujeres, en especial a las jóvenes y adolescentes, para que no soporten "ni un solo síntoma" de maltrato de sus parejas o exparejas y denuncien.
La presidenta del Instituto Catalán de las Mujeres (ICD), Montse Gatell, ha alertado por su parte sobre el espejismo de la igualdad.
"Los más jóvenes inician relaciones de pareja siguiendo modelos que a menudo se construyen sobre estereotipos. Sólo erradicaremos esas desigualdades si hay una asunción de los valores de la igualdad efectiva entre mujeres y hombres y una suma real y responsable de complicidades", ha declarado Gatell.
En la misma línea, la presidenta del Observatorio estatal contra la Violencia Doméstica y de Género, Inmaculada Montalbán, ha señalado que "es el momento de abordar seriamente la educación en materia de igualdad" y ha destacado la importancia "de trabajar en el aprendizaje por parte de los jóvenes para impedir que reproduzcan los comportamientos machistas".
Montalbán, que ha defendido asimismo la necesidad de "trabajar desde las familias y desde los colegios en identificar los comportamientos machistas para corregirlos e interrumpirlos", ha alertado de que los estudios demuestran que un 25% de los jóvenes opina que las mujeres deben quedarse en casa o que un 70% tiene asumido que los salarios sean más bajos en caso de las mujeres.
Según los datos del observatorio, en 2012 del total de 52 víctimas fallecidas por violencia machista 15 eran menores de 30 años y en lo que llevamos de año hay 38 víctimas confirmadas, 8 de ellas también menores de 30 años.
