SANTIAGO. Alfonso Basterra tendrá que enfrentarse a las pruebas de por qué en el cuerpo Asunta Basterra aparecieron medicamentos junto al plato de albóndigas con champiñones que ese día ingirió la pequeña. Según reveló ayer Antena 3, Alfonso Basterra explicó ante el juez que los medicamentos los puso él en la comida pensando que eran para la alergia de su hija y no los que habitualmente toma él, aunque el magistrado le advirtió que esos medicamentos no se venden en polvo. Por ello, el magistrado está a la espera de que en Madrid se lleven a cabo análisis como los de toxicología, ADN y trazas, mientras que la Comandancia de la Guardia Civil de A Coruña se encarga, entre otros aspectos, de analizar los registros solicitados de las líneas telefónicas de los padres de la niña y de Asunta.

En este sentido, fuentes de la investigación insistieron en que prosiguen los análisis de la información recabada en los registros de los domicilios y otras posibles pruebas para tratar de esclarecer la muerte de la niña de 12 años. Paralelamente, Belén Hospido, abogada del padre de Asunta, presentó ayer un recurso de apelación contra el decreto de prisión firmado por el juez José Antonio Vázquez Taín.

ACCIÓN POPULAR En cuanto al recurso presentado por la defensa de Rosario Porto pidiendo la excarcelación de su cliente, el Juzgado de Instrucción Número 2 de Santiago dio traslado al fiscal y será la Audiencia Provincial de A Coruña la que decidirá, Por otra parte, los abogados de la Asociación Clara Campoamor presentaron ayer una acción popular contra los "responsables" de la muerte de la niña.

A la salida de los juzgados de Santiago de Compostela, en declaraciones a los medios, uno de los abogados de esta asociación que vela por los derechos de la infancia y de la mujer, Ricardo Pérez Lama, explicó que había conversado con el juez que lleva la causa, que ahora tiene que resolver si acepta esta personación. Ricardo Pérez Lema indicó que la causa va contra los "responsables", que pese a que están sin determinar, "alguno habrá", según sus propias palabras.