BILBAO. Según ha informado la Delegación del Gobierno, la Guardia Civil detectó el pasado día 1 de agosto la llegada a Bilbao desde Lisboa (Portugal), de un ciudadano de la República Checa que había embarcado originariamente en la ciudad brasileña de Sao Paulo.
A su llegada, los agentes comprobaron que dicha persona apenas portaba equipaje, mostrándose además inusualmente nervioso a las preguntas sobre su procedencia.
Ante los indicios existentes y debido al riesgo que puede entrañar para su integridad el portar droga en su interior, los guardias civiles le trasladaron al Hospital de Basurto.
Allí, un examen radiológico mostró que portaba 70 envoltorios en el aparato digestivo, por lo que se le detuvo como presunto autor de un delito de tráfico de drogas.
Debido al inminente peligro para su vida que esta modalidad de narcotráfico conlleva, los médicos del hospital, contando con su consentimiento, le operaron para extraer la droga, que arrojó un peso de ochocientos gramos de cocaína en total.
El joven, de veinticuatro años y natural de la República Checa, quedó ingresado en el centro hospitalario para su recuperación, a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Bilbao.