La operadora de la accidentada central nuclear de Fukushima admitió ayer que unas 300 toneladas de agua radiactiva se han filtrado al exterior desde los tanques que usa para almacenar este líquido empleado para enfriar los reactores de la planta. En una rueda de prensa ofrecida horas después de que operarios de la planta detectaran unos charcos junto a los mencionados tanques, Tokyo Electric Power (TEPCO) explicó que la cantidad de la fuga es bastante mayor que los 120 litros estimados inicialmente.