Vitoria. El dolor y la consternación por las consecuencias del accidente de tráfico ocurrido en la tarde del martes se reflejaba por las calles de La Puebla de Arganzón, donde un pesado silencio testimoniaba el sentir de los vecinos por el fallecimiento de Mikel, un niño de cinco años. Vecino, junto a su familia, de la villa trebiñesa, aunque parte del invierno lo pasaban en Vitoria, su fallecimiento conmocionó incluso al Ayuntamiento, que ayer mismo hacía público un bando, firmado por el alcalde, Roberto Ortiz, en el que se afirmaba que "como testimonio del dolor del municipios de La Puebla de Arganzón ante el inesperado fallecimiento del menor Mikel Urrutia Renedo, vecino de este pueblo, el alcalde resuelve declarar luto oficial de dos días, desde las 8.00 del día 24 hasta las 24.00 horas del día 24 del presente mes de julio. Asimismo se acuerda trasladar la condolencia y solidaridad de este ayuntamiento y de todos los vecinos a los familiares de Mikel. Y, por último, se anuncia que se suspenden todos los actos públicos durante estos dos días".

El trágico suceso ocurrió el martes, poco después de las cinco de la tarde. El padre de Mikel, el niño fallecido, y su hermano Iñigo, de ocho años, viajaban en un Hyundai ix35 en dirección a Condado de Trebiño, mientras que en dirección opuesta circulaba Carlos Salinas, un popular exjugador del Baskonia, en un BMW serie 1, en dirección a La Puebla de Arganzón. Al llegar ambos al punto kilométrico 5,5 de la carretera CL-127, entre Añastro y un cruce que hay unos kilómetros más adelante, que reparte el tráfico hacia Miranda de Ebro, Trebiño o Cucho, por causas que todavía no se conocen pero que la Guardia Civil investiga, ya que además es un tramo recto y con buena visibilidad, aunque llovía un poco en ese momento, los vehículos colisionaron frontalmente. A consecuencia de la violencia de la colisión, el cuerpo de Mikel fue desplazado hacia delante, provocándoles heridas mortales, a pesar de que los dos pequeños iban perfectamente instalados en sus sillones infantiles y anclados.

La trágica imagen del accidente y la primera ayuda llegaron a través de la madre de los niños que viajaba justo detrás de ellos en otro vehículo. Afortunadamente pudo ser atendida por personas que llegaron en otros coches y que llamaron de inmediato a los servicios de emergencia del 112 de Castilla y León, que movilizó a los Bomberos de Miranda de Ebro y de Vitoria, ambulancias, Guardia Civil y Ertzaintza. Asimismo se desplazó hasta el lugar del accidente un helicóptero, aunque finalmente no se llegó a utilizar ya que Vitoria, lugar al que fueron trasladados los heridos, está a 20 minutos por carretera.

El herido que presentaba mayores complicaciones era Carlos Salinas. De hecho en un primer momento se pensó que tendrían que desencarcelarlo los Bomberos, aunque finalmente pudo ser atendido sin necesidad de hacer nada en el coche.

Salinas fue trasladado de inmediato al Hospital Santiago, de Vitoria, donde los médicos no pudieron hacer nada por salvarle la vida, falleciendo tres horas después del accidente. Por su parte, el padre de los niños e Iñigo fueron trasladados a otro centro hospitalario, con graves heridas, aunque no se teme por su vida.

En el lugar del suceso se produjeron escenas de gran dramatismo, especialmente con la llegada de los abuelos de los niños desde La Puebla de Arganzón y Trebiño. En su desesperación y dolor los abuelos se negaron a abandonar el lugar y el cuidado de los restos del pequeño Mikel, que tuvo que ser trasladado a un furgón policial hasta que llegó la furgoneta del Instituto de Medicina Legal dos horas después del accidente.

El alcalde de La Puebla de Labarca, Roberto Ortiz, con la voz visiblemente emocionada señalaba ayer que "todo el pueblo está consternado. Ha sido un golpe muy duro, un accidente incomprensible, que se ha llevado la vida de Mikel y de Carlos Salinas". Ortiz comentaba que el pequeño estaba pasando el mes de julio en un campamento que se celebraba en la ikastola de Trebiño, donde ayer los compañeros y monitores se sentían "profundamente afectados por su fallecimiento. Al parecer, y salvo que se decida otra cosa en el Instituto de Medicina Legal, el entierro y funeral se celebraran el viernes.

Gran conocido en Vitoria La segunda persona en fallecer fue Carlos Salinas, un exbaskonista, persona muy querida y respetada en Vitoria, donde residía y donde cubría su afición por el club como comentarista en varios medios de comunicación. Salinas se formó primero en San Viator y se convirtió en el primer jugador en dar el salto de la estructura deportiva del citado centro escolar al club azulgrana. Allí, tras el preceptivo paso por las categorías inferiores del club gasteiztarra, dio el salto al primer equipo baskonista en la temporada 74-75, al que estuvo ligado dos temporadas inicialmente; posteriormente una en el Helios Zaragoza y otra en el Breogán de Lugo, y regresó al Baskonia otras dos, aunque una de ellas en Primera B.

En la actualidad, Salinas trabajaba en la oficina de la Caja Vital de la plaza de Cataluña y también ejercía como vicepresidente económico de la Federación Alavesa de Baloncesto. Precisamente, su pasión por este deporte le llevaba a colaborar con diferentes medios de comunicación y en tertulias de todo tipo relacionadas con el deporte de la canasta.

El funeral por Carlos Salinas se llevará a cabo mañana viernes, a las siete y media de la tarde, en la parroquia de la Coronación de Nuestra Señora, donde se espera la presencia no sólo de familiares y amigos, sino también de directivos del club.

accidente con el tranvía En otro orden de cosas, una mujer de 71 años de edad resultó herida leve este pasado lunes tras ser atropellada en Vitoria por el tranvía cuando cruzaba incorrectamente" y "sin la debida atención la calle Honduras", según ha informado en un comunicado la Policía Local. La Guardia Urbana señaló que el accidente ocurrió sobre las siete de la tarde y la mujer fue asistida en el Hospital Txagorritxu, donde la atendieron de lesiones de carácter leve.

La Policía Local intervino además en otros 12 accidentes de tráfico y en dos de ellos resultaron heridas leves tres personas. Además, una colisión por alcance entre dos turismos se produjo, alrededor de las seis de la tarde en la calle Salvatierrabide. A consecuencia del accidente resultó herida leve la conductora de uno de los dos vehículos, de 55 años, que tuvo que ser asistida en el Hospital Santiago.