gasteiz. "La Unidad de investigación y detección de la variabilidad de la práctica clínica dentro de la sanidad pública vasca es una herramienta esencial para la mejora continua y la búsqueda de la excelencia en Osakidetza", sentencia Felipe Aizpuru.

¿Quién conforma la unidad? ¿Qué objetivos persigue?

La compone un grupo multidisciplinar de médicos, farmacéuticos, matemáticos... junto con investigadores de Gipuzkoa y Bizkaia y el apoyo de la Fundación Vasca de Innovación e Investigación Sanitaria (Bioef). Nuestro trabajo se centra en identificar cuándo y por qué algunos profesionales sanitarios, ante la misma situación clínica, actúan de distinta manera.

¿Buscan uniformizar la actuación de los clínicos?

No. No se trata de hacer desaparecer al cien por cien las variaciones. Las personas, los sistemas sanitarios, las circunstancias ambientales, sociales y culturales, y los propios sanitarios son diferentes. De hecho, algunas de las variaciones observadas en la práctica clínica no solo son justificadas sino también esperables.

¿Cuáles serían las variaciones clínicas injustificadas?

Es lo que intentamos detectar con los estudios que llevamos a cabo. Pero no serían justificadas si las diferencias en el manejo de enfermedades se deben a discrepancias en la propia comunidad científica

¿Cómo las identifican?

Se utiliza un método científico que permite identificar estas variaciones, tanto entre las distintas zonas cubiertas por Osakidetza como compararnos con otras Comunidades del Estado.

Se trata de la optimización continúa de los servicios sanitarios

Está demostrado que en sanidad hacer más no siempre significa hacerlo mejor. Esta labor debería conducir a que todos los médicos, en todas las zonas geográficas, aprovechen al máximo las intervenciones que se sabe que son eficaces y, por el contrario, que tiendan a desaparecer aquellas cuya eficacia no está suficientemente demostrada. Con ello, se conseguiría una mayor equidad entre todos los ciudadanos y, al mismo tiempo, un mejor aprovechamiento de los recursos disponibles. En estos momentos de crisis económica este aspecto resulta trascendental.

¿Las conclusiones de sus investigaciones a quiénes las remiten?

Por un lado, las autoridades sanitarias -directivos de Osakidetza y del Departamento de Salud, jefes de servicio, implicados, etcétera- tienen un conocimiento inmediato de ello cuando concluimos cada una de nuestras investigaciones. Todo ello, permite mejorar continuamente los servicios sanitarios.

En cuanto a los procedimientos que estudian. ¿En qué situación se encuentra Euskadi?

En el País Vasco disponemos de una asistencia sanitaria pública de gran calidad, con excelente accesibilidad y grandes profesionales y, un buen sistema de información, lo que hace que en la mayor parte de los procedimientos estudiados estemos en la parte alta en relación con el resto de Comunidades Autónomas del Estado.

¿Qué temas han tratado en sus investigaciones?

El Grupo de Estudios de Variaciones del Sistema Nacional de Salud (SNS), del que somos miembros fundadores, ha publicado nùmeros monográficos Entre los temas tratados destacan hospitalizaciones en cirugía ortopédica y traumatológica, pediatría, dolencias cardiovasculares, cirugia general, oncológic , salud mental, coordinado por nosotros, hospitalizaciones en mayores de 65 años y hospitalizaciones potencialmente evitables.