Lakua pedirá retirar la reforma educativa si Wert persiste en cerrar vías al consenso

w La consejera de Educación antepone el sistema educativo vasco propio frente a un modelo "sin "acuerdos" w El lehendakari Urkullu aboga por ahondar en los pactos plurales tejidos en 30 años

imanol fradua

portugalete. Habían abogado por explorar la posibilidad de hacer variar la postura del Gobierno español a través de la negociación. Pero a la vista de las negativas a las repetidas llamadas a sondear las vías del acuerdo, el Gobierno Vasco solicitó ayer, en el transcurso del Ibilaldia, la fiesta de las ikastolas de Bizkaia celebrada en Portugalete, la retirada del proyecto de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE). La imposibilidad de llegar a pactos para modificar las invasiones competenciales de la Ley Wert al sistema educativo vasco, unido al aún más complejo horizonte que se avecina por su aplicación mediante el rodillo parlamentario del PP en Madrid, han motivado esta postura.

Tanto el lehendakari, Iñigo Urkullu, como la titular del Departamento de Educación, Política Lingüística y Cultura, Cristina Uriarte, insistieron en la oposición de Lakua ante la Ley Wert. Principalmente por el fondo del proyecto redactado por los populares, aunque también motivado por las formas en su tramitación, el Ejecutivo vasco se reafirmó -ya vaticinó su rechazo anteriormente tras meses de peticiones para atender a las demandas llegadas desde Euskadi- en la necesidad de tejer pactos plurales frente a la tan criticada reforma educativa. Urkullu encabezó la solicitud del Ejecutivo vasco al recordar que el Estado español ha experimentado "cinco Lomces" en 30 años, mientras que en Euskadi "lo que de verdad ha funcionado ha sido un pacto educativo vasco" que ha tenido como llave "la participación de la comunidad educativa". Tras tres décadas de "esfuerzos compartidos", el recorrido experimentado "nos ha enseñado cual es el camino idóneo de cara al futuro", terció el lehendakari.

"Euskadi es un país de trabajo por el consenso, de esfuerzos compartidos. La educación y el euskera son ejemplos. Y durante 30 años hemos forjado un acuerdo en torno a la educación y al euskera", recordó Urkullu, por lo que animó a los presentes a proseguir por esta senda abierta. "Es el camino por el que debemos seguir avanzando" en un sistema educativo propio que, según el máximo responsable del gabinete vasco, se ha tejido, no sin dificultades, "desde los pactos plurales".

La trayectoria mantenida por la estructura educativa vasca también estuvo reflejada en las palabras de la consejera Uriarte ayer en Portugalete. Si bien esta misma semana tildó la reforma legislativa, que aún debe tramitarse y aprobarse en el Congreso de los Diputados, como una pretensión de "uniformar y recentralizar" el sistema educativo en el Estado español, la titular de Educación de Lakua avanzó, por vez primera, la posible retirada de la ley ideada por el ministro Wert ante la falta de consenso.

"El sistema educativo vasco es muy bueno. Ahí están sus resultados", aseguró satisfecha Uriarte. Sin embargo, adelantó la "preocupación" que genera la reforma de un PP que se ha enrocado en una ley "que no responde a nuestras necesidades. La LOMCE no tiene acuerdos, carece de consensos. Ni político, ni social", estimó. "Lo que necesitamos es garantizar e impulsar nuestro propio sistema. Evidentemente que podemos mejorarlo, pero la LOMCE no nos da esa posibilidad". "Es por ello que estamos en contra", ahondó.

avisos previos Los responsables de Lakua ya habían advertido de la posibilidad de un rechazo rotundo hacia la ley ideada por el ministro de Educación y Cultura, José Ignacio Wert. Es más, lo hicieron estamisma semana en una comparecencia parlamentaria en la que Cristina Uriarte aseveró que la recentralización del sistema educativo español no es una alternativa para Euskadi, sino una "intromisión" en el marco competencial.

Entre otros aspectos, la consejera remarcó que son las instituciones vascas las responsables de gestionar la regulación de las lenguas, además de referirse a los contenidos del proyecto referidos a las lenguas cooficiales como el euskera, para los que prevé que dejen de considerarse asignaturas troncales. Por último, también apuntó hacia la necesidad de reactivar el consenso entre los agentes educativos de la CAV para construir un muro de contención frente a la reforma por cuya aplicación suspira el PP pese a las críticas recibidas desde muy diferentes sectores.

Y es que pese a que Wert avisara hace 8 días de que la reforma educativa disponía aún de "un amplísimo margen de negociación", el Ejecutivo de Gasteiz -junto a Catalunya, las dos autonomías que más beligerantes se han mostrado- ya avisó en febrero de que apuraría el paso en una negociación bilateral antes de pasar a solicitar medidas más contundentes. Las líneas rojas fijadas entonces parecen haberse rebasado ahora.

La reforma del sistema educativo español sobrevoló ayer el acto inagural de la cita anual de las ikastolas de Bizkaia que tuvo su epicentro en tres localidades de Ezkerraldea. Y es que aunque fue Portugalete la acogió la fiesta del euskera, el recorrido también transitó por Sestao y Santurtzi. La Ley Wert estuvo presente también en las valoraciones realizadas de los responsables de las confederación de ikastolas.