CEUTA. El pesquero "Frida", con bandera y tripulación de Ghana, llegó a las inmediaciones del litoral ceutí unos días antes de las fiestas navideñas después de haber participado en Senegal escoltando al buque "Geo Pacific" en un estudio sísmico en el mar.
Desde aguas de Senegal se dirigieron hacia Las Palmas de Gran Canarias, donde recibieron la comunicación del armador para dirigirse hacia Ceuta para recoger un equipo de derrame de combustible.
Según han dicho a Efe los marineros, se suponía que iban a estar en Ceuta un máximo de cinco días y posteriormente regresarían a su país de origen, Ghana, para poder reencontrarse con sus familias tras un largo periplo en el mar.
Sin embargo, los cinco días se acaban de convertir ya en cinco meses puesto que en el mismo momento en el que llegaron al litoral ceutí el armador se desentendió de los ocho marineros, a los que ya había dejado de pagar unos meses antes.
Ahora, el capitán Emmanuel W. Gumah, el primer oficial Samuel Wallendoff y los marineros Ibrahim, Aizin, Nataliel, Patrick, Manuel y Yosué pasan las horas muertas en el barco, a la espera de que se resuelva su situación.
Después de haber permanecido desde diciembre de 2012 anclados en la bahía norte de Ceuta, el pasado sábado la Autoridad Portuaria los trasladó al interior del puerto ceutí para darles refugio por razones humanitarias, técnicas y de seguridad marítima, según han informado a Efe fuentes portuarias.
Ahora, por lo menos, el buque se encuentra amarrado en el interior del puerto ceutí, mientras la tripulación intenta pasar las horas a la espera de noticias de la Capitanía Marítima de Ceuta.
El organismo portuario les ha suministrado agua dulce mientras que la Cruz Roja Española aporta diariamente alimentos y botellas de agua para una tripulación que carece de combustible, víveres y dinero.
El armador les adeuda unos 100.000 dólares al no recibir sus nóminas desde el 23 de agosto de 2012, según ha informado el primer oficial, Samuel Wallendoff, quien lamenta a Efe la situación de abandono que padecen.
Los ocho marineros, que dieron a conocer su caso este mes al quedarse sin comida, han pedido la ayuda de las autoridades marítimas de Ceuta para ser repatriados a su país de origen porque lo único que desean es volver a ver a sus familias.
Los marineros ocupan un pesquero de altura construido en el año 1964 de 32 metros de eslora, 7 de manga y 3 metros de calado, cuya bandera de Ghana ondea aunque esté rota, igual que el ánimo de estos pescadores.