VIENA. Así lo denunció hoy la Agencia Europea de Derechos Fundamentales (FRA), con sede en Viena, al presentar los resultados de la mayor encuesta realizada hasta el momento entre este colectivo en los países de la UE y en Croacia, nación que se adherirá a Los Veintisiete el próximo 1 de julio.
En la encuesta, llevada a cabo entre abril y junio de 2012, participaron más de 93.000 personas de 18 años o mayores, a quienes se les preguntó si se habían sentido víctimas de actos de "violencia, abuso verbal o incitación al odio" por motivo de su orientación sexual.
Un tercio de los consultados indicó haberse sentido discriminado "en, al menos, uno de estos ámbitos": el educativo, el del puesto de trabajo, los lugares públicos o el momento de solicitar asistencia sanitaria, precisa la FRA en un comunicado facilitado a la prensa.
Dos de cada tres personas confesó ocultar su condición de LGTB en el entorno escolar, y al menos el 60 % de ellas respondió que había sido "víctima de comentarios o conductas negativas" por su sexualidad en centros de enseñanza.
"Descubrimos que más del 80 % de los encuestados en todos los Estados señalaron haber sido objeto de comentarios negativos en el área educativa, sin diferencias significativas entre países", lamentó Dennis van der Veur, uno de los portavoces de la agencia europea.
Por otro lado, el 19 % de los encuestados afirmó sentirse discriminado "en el trabajo o a la hora de buscar un empleo, a pesar de la protección jurídica que brinda la legislación de la UE", así la FRA.
Esta agencia advirtió también del alto porcentaje de personas que manifestó tener miedo de ir de la mano en público "con una pareja de su mismo sexo" (el 66 %), cifra que, en el caso de varones gais y bisexuales, se incrementó hasta el 75 %.
En esta última cuestión, España se encuentra por debajo de la media europea, con un 45 % de personas que no se atreven a ir de la mano en público, según los datos del estudio.
"A pesar de que la cifra es considerablemente inferior, no debemos olvidar que un 45 % sigue siendo casi la mitad de las personas de este colectivo que han contestado a la encuesta en España", señaló Waltraud Heller, responsable de comunicación.
Otro de los problemas que destacó la en su informe es el hecho de que un 60 % de los encuestados considerara que denunciar incidentes discriminatorios a la policía no supondría ningún cambio, puesto que las fuerzas de seguridad "no harían nada al respecto".
La encuesta permitió a los participantes escribir un comentario personal para relatar de primera mano las experiencias vividas. Uno de los transexuales consultados, de 29 años de edad y de nacionalidad búlgara, narró: "He experimentado humillación, palizas e insultos tanto de gente que conozco como de gente que no conozco, pero me gustaría que la gente a mi alrededor aprendiera que soy un ser humano como otro cualquiera, ¡y que mi orientación sexual no me hace distinto a ellos!"
De todos los grupos que respondieron a la encuesta, los de la comunidad transexual admitieron haberse sentido más marginados que los demás, y también entre ellos se registró un mayor índice por ser víctimas de violencia.
El objetivo de este sondeo era esclarecer la dimensión y la naturaleza de la discriminación de las que son objeto en la UE las personas LGTB, y ofrecer así datos a los responsables políticos para que puedan establecer estrategias y respuestas adecuadas que "protejan" y "promuevan" sus derechos fundamentales.
Según la FRA, "Muchos (LGTB) ocultan su identidad y viven aislados o, incluso atemorizados. Sienten que, debido a su condición sexual, 'no pueden ser ellos mismos' en su vida diaria por miedo a la discriminación".