washington. La búsqueda de otras posibles víctimas del secuestrador de Cleveland se cerró ayer en la casa de su propiedad sin que se hallaran restos humanos, como temía el FBI en un principio, informó a la prensa la portavoz de la policía federal Vicki Anderson.
El presunto criminal, Ariel Castro, mantuvo allí encerradas a tres mujeres durante una década, a quienes violaba y maltrataba. La policía ha reunido más de 200 pruebas en la casa, aunque Anderson no quiso dar más detalles al respecto.
Las comparaciones del ADN de Castro con otros casos de Ohio no han dado resultados positivos, según indicó el FBI. El acusado se encuentra en una celda de tres por tres metros vigilado constantemente, por temor a que se suicide. Los resultados preliminares de ADN realizados a Ariel Castro, el presunto secuestrador, confirman que este es el padre de la pequeña hallada con las víctimas el pasado lunes, tal y como dijo el fiscal general de Ohio, Mike DeWine. Según explicó, una muestra de ADN de Castro, que este jueves fue acusado formalmente de cuatro cargos de secuestro y tres de violación, fue analizada por expertos forenses que han podido "confirmar que Castro es el padre de la niña de seis años nacida en cautiverio de una de las víctimas del secuestro". El caso se destapó el lunes, cuando una de las jóvenes secuestradas, Amanda Berry, la madre de la pequeña, logró escapar y pedir ayuda a los vecinos. Esta halló al llegar a la casa de Castro a otras dos jóvenes más, Gina DeJesus y Michelle Knight, desaparecidas como Berry desde hacía una década. Según se ha ido conociendo a lo largo de la semana, Castro presuntamente mantuvo a las jóvenes encerradas y atadas durante todo este tiempo, maltratándolas y violándolas repetidamente. La víspera un fiscal local adelantó que se está estudiando pedir la pena de muerte contra Castro por los hasta cinco abortos que le provocó a al menos una de las secuestradas, Michelle Knight, según ha trascendido de informes policiales filtrados a la prensa. Knight, de 32 años y la joven que más tiempo permaneció secuestrada, desde agosto de 2002, salió finalmente este viernes del hospital. La mujer era la única que permanecía ingresada aún, ya que Berry, de 27 años, y DeJesus, de 23, regresaron a sus casas el miércoles. No está claro sin embargo a dónde se dirigió Knight tras recibir el alta médica.
desconocimiento Junto con Ariel Castro, a quien la juez impuso la víspera una fianza de ocho millones de dólares, fueron detenidos dos de sus hermanos, Pedro y Onil Castro, quienes, sin embargo, fueron puestos en libertad el jueves por falta de pruebas en su participación o conocimiento de los hechos. También algunos de los hijos del acusado han asegurado estos días a los medios su total desconocimiento de la situación. En entrevista con la cadena CNN, una de las hijas de Ariel Castro, Angie Gregg, se mostró horrorizada por los hechos de que se acusa a su padre. Gregg dijo que esa imagen no cuadra con el hombre "amigable, cariñoso y adorable" que recordaba de su infancia, si bien reconoció que maltrató duramente a su madre, ya fallecida, y que los últimos años mantuvo extrañas costumbres.
Entre otros, dijo que ahora le "cuadran" actitudes sorprendentes de su padre, como que se negaba siempre a abandonar su casa durante más de unas horas, que "tardaba una eternidad en abrir la puerta" cuando llegaba a su casa o que solía mantener la música muy alta y cerrar el acceso al sótano o a la planta alta de la casa durante sus visitas.