"los pagos de uva de la vendimia del pasado ejercicio 2012 que se están conociendo en las últimas semanas, a pesar de la escasez de la cosecha, se sitúan por debajo de los costes de producción". Éste es, a juicio de UAGA (Unión Agroganadera de Álava), y de las centrales EHNE y UAGR -homólogos del primero en Navarra y La Rioja, las otras dos zonas de la Denominación de Origen Calificada (DOC) Rioja-, el verdadero interés de los viticultores alaveses, "y no las peleas entre organizaciones para ver quién manda" en la Denominación vitivinícola.

Esta situación reedita los conflictos vividos en el entorno de la DOC por el precio de la uva recolectada. Precisamente, y al respecto, durante la pasada vendimia la crítica de las centrales agrarias se convirtió en recurrente. Se decía entonces que mientras que en otras zonas vitícolas del Estado ya se sabía desde hacía semanas el precio al que se pagarían las uvas de 2012, el oscurantismo y el abuso de posición de dominio de las grandes bodegas de la DOC Rioja impedía conocer los precios a los que se pagaría la uva que se vendimiaba en la Denominación de Origen Calificada Rioja. Unos precios que, si en otras zonas aumentaron hasta un 60% respecto a la campaña pasada, en Rioja Alavesa se desconocían entonces.

Sobre el particular, desde la parte social se añadía que consideraba inaceptable la situación de opacidad del mercado interno de la DOC Rioja, mientras que en otras denominaciones los precios se conocían desde hacía semanas. Esta falta de transparencia impedía la competencia entre los operadores, obligando a los viticultores a entregar las uvas "a resultas", sin saber de antemano cuándo o a cuánto las cobrarán. Para las centrales agrarias, esta situación no sólo es perjudicial para los agricultores, sino que también es mala para las propias bodegas, ya que ante una cosecha tan escasa como la que hubo este año se podían encontrar con sorpresas en los precios, si dada la escasez de fruto tenían que salir a buscar uva durante la vendimia.

Contra esta situación de oscurantismo, los representantes de los agricultores reiteran su propuesta de regulación del mercado interno en la DOC Rioja, una propuesta conveniente no sólo para los viticultores, sino para el conjunto de la Denominación de Origen. Su propuesta consiste en que toda operación interna en el ámbito Rioja tenga obligatoriamente que formalizarse con un contrato por escrito en el que se detalle tanto el precio como el plazo de pago por la uva o el vino a granel. De esta forma, se podría articular un eficaz observatorio de precios que facilite la transparencia y termine con la desventaja competitiva que sufren los viticultores.

Sin embargo, el citado no es el único conflicto abierto entre los agricultores y los gestores de la DOC Rioja. De hecho, ahora también se ha conocido que "mientras esto ocurre -pago de precios por debajo del precio de coste-, el Consejo Regulador aporta 30.000 euros para el patrocinio de la Copa del Rey de balonmano. Una nueva partida, que no existía en los presupuestos, y que fue aprobada unilateralmente por la presidencia del Consejo Regulador sin haberse aprobado en Pleno".

Otros conflictos En cuanto a los conflictos que se están suscitando para elegir un candidato que presida los órganos del Consejo Regulador -órgano de gestión y dirección de la Denominación de Origen Calificada-, las centrales agrarias representadas exigen que, en lugar de meter prisa para renovar la Interprofesional -órgano de representación sectorial en el ámbito de la DOC-, "mejor se haría en contribuir al presupuesto del Consejo Regulador".

Al respecto, de la presidencia de la Interprofesional y del Consejo Regulador del Rioja, UAGA, EHNE y UAGR reiteran su posición de "apoyar únicamente a un candidato que sea de consenso de todo el sector productor. Pero que lo importante no son las personas, sino los logros, y una Interprofesional que no garantiza la rentabilidad de sus miembros poco futuro tiene".