gasteiz. La consejera de Desarrollo Económico y Competitividad del Gobierno Vasco, Arantza Tapia, defendió ayer que se investigue si hay gas en el subsuelo de Euskadi. No obstante, rechazó su explotación porque las técnicas actuales no garantizan la protección del medio ambiente. Tales conclusiones derivaron de la comparecencia de la citada en la comisión del ramo del Legislativo autonómico. Su intervención obedeció a una petición de EH Bildu, grupo político que mostró interés en conocer los trabajos que está desarrollando en este ámbito la Sociedad de Hidrocarburos de Euskadi (Shesa), dependiente de Lakua.

Al respecto, la consejera indicó que el Ejecutivo debe saber si hay gas bajo tierra, en qué cantidad y si es de tipo convencional o no convencional para luego ver "qué opciones hay". "Sí a la investigación y no a la explotación" del gas no convencional mediante la técnica de fracturación hidráulica, conocida popularmente como fracking -método que ha provocado el rechazo de gran parte de la sociedad, sobretodo, en Álava-, porque a día de hoy, expuso Tapia, "no hay ninguna tecnología que puede proteger el medio ambiente" en la fase de extracción. De todas formas matizó que la tecnología avanza y que en el futuro podría descubrirse una técnica para sacar el gas no convencional que no dañe el entorno. De hecho, Tapia apuntó la existencia de estudios que sostienen la viabilidad de inyectar gas y no agua en la tierra para extraer el gas del subsuelo.

Si finalmente se llega a la fase de explotación, el Gobierno "respetará al máximo el medio ambiente", aseveró la consejera, al tiempo que recalcó que los permisos concedidos a Shesa para hacer sondeos sobre la posible presencia de gas no contemplan "ningún tipo de explotación" y en ningún caso "suponen un riesgo para el medio ambiente".

Sobre el particular, los datos del Ejecutivo autonómico especifican que en la actualidad Shesa cuenta con diecisiete permisos (ocho referidos a gas convencional y nueve para no convencional) que caducan en 2014. La consejera advirtió sobre el peligro de que no se renueven estos permisos y de que la iniciativa pase "de lo público a lo privado", con lo que podría perderse la garantía del respeto al medio ambiente.

Tapia, que informará "puntualmente" de los pasos que el Gobierno autonómico dé en este asunto, anunció la puesta en marcha de una comisión con la participación de universidades, científicos y expertos en medio ambiente y energía que "aporte luz y permita continuar con este trabajo con el máximo de garantías".

Recopilación cartográfica En otro orden de cosas, un equipo de la Escuela de Ingeniería de Vitoria ha podido documentar 413 mapas y planos distintos, repartidos entre 23 archivos, fechados entre 1605 y 1900. En concreto, se trata de un trabajo de liderado por profesores de Ingeniería en Geomática y Topografía del citado centro docente, que están realizando un inventario digital de la Cartografía Histórica de Álava en el que se recoge toda la documentación anterior a 1900. Los temas con los que se relacionan los mapas inventariados son generales, militares, de población, obra civil y catastrales.

Tres años de ardua labor, muchos desplazamientos y un gran número de horas de trabajo dedicadas a la búsqueda a través de los catálogos y de la consulta de documentos, que todavía se prolongará hasta el verano, tendrán como resultado un inventario digital de la Cartografía Histórica de Álava, en el que han colaborado los profesores María Luisa Palanques, Amaia Mesana, María Pilar Martínez y Miguel Calvo, junto a un grupo del alumnado.

A la vista de los resultados obtenidos, se puede afirmar que el esfuerzo está valiendo la pena, ya que a día de hoy se han podido documentar 413 mapas y planos distintos, repartidos entre 23 archivos, en los que aparece representada toda o parte de la provincia de Álava, fechados entre 1605 y 1900, de los cuales 11 son del siglo XVII, algo más de 50 del siglo XVIII, siete no han podido ser fechados todavía y el resto fueron realizados en el siglo XIX.