vitoria. El PNV en el Ayuntamiento de Vitoria ha reclamado al equipo de gobierno que deje de publicitar un teléfono obsoleto para atención a las víctimas de la violencia hacia las mujeres. En concreto, en febrero de este año, el Ayuntamiento firmó un protocolo con el Gobierno Vasco por el que se adhería al número único para la atención a quienes padecen la violencia de género en el conjunto de la CAV, concretamente el teléfono 900 840 111. Desde el 4 de marzo este cambio se hizo efectivo y el antiguo teléfono (900 701 700) dejó de estar operativo. Sin embargo, actualmente varios edificios municipales, sin ir más lejos, la propia Casa Consistorial, conservan las placas informativas con el anterior dígito, unos letreros que también se distribuyeron por comercios, locales de hostelería, instituciones, centros de salud y asociaciones de vecinos, entre otras entidades de la capital alavesa.

"Activar un nuevo teléfono de atención y seguir anunciando el anterior no tiene ningún sentido. Esperamos que el equipo de gobierno subsane cuanto antes este error porque afecta a una cuestión muy sensible donde no se pueden tolerar ni la incongruencia ni el descuido", señaló ayer la portavoz nacionalista en el área de Asuntos Sociales, Nerea Melgosa, que reclamó la retirada urgente de todas las placas con el antiguo número y la distribución de rótulos con el nuevo teléfono.

La concejala jeltzale recordó que el Ayuntamiento, pionero en la puesta en marcha de un teléfono para las víctimas de la violencia de género, prestó atención psicológica a 2.164 mujeres por esta cuestión en 2012. De ellas, 326 eran nuevos casos frente a los 269 de 2011. En cuanto a la atención psicológica a menores, el total de atendidas ascendió a 351 de las que 54 eran nuevos casos. "Cualquier esfuerzo es poco frente una lacra que cada semana nos sigue deparando noticias negativas. Las víctimas de la violencia de género necesitan la mejor atención posible y generar confusión sobre una de las herramientas más útiles en este campo, desde luego, no ayuda", concluyó Nerea Melgosa.

Dadas las circunstancias, se antoja un error grave lo acontecido con la publicidad del viejo número. Y más si se tienen en cuenta las palabras de la concejal de Asuntos Sociales, Ainhoa Domaica, en el momento de anunciar la migración al número autonómico. En su momento, ésta explicó que la decisión trataba "de hacer más sencillo este trámite para las mujeres y evitarles memorizar números distintos que, en ocasiones, pueden llevar a confusión". "Nuestra apuesta política hubiera sido ir a un único teléfono en toda España pero ya que no es así, al menos colaboramos para que en Euskadi la situación se simplifique".

Teóricamente, con el protocolo firmado con el Gobierno Vasco el Ayuntamiento abogaba por garantizar el trabajo en red entre administraciones en aras de lograr una mejora continua de todos los recursos de protección con el fin último "de que las mujeres que se encuentren en esa situación sean atendidas lo mejor posible y refuercen su confianza en las instituciones", indicó la edil popular en aquel entonces.

Sea como fuere, lo cierto es que a través de este servicio de atención, se ofrece a las víctimas una atención efectiva en situaciones de violencia de género mediante una escucha activa que les sirva de apoyo emocional y les anime a conseguir su autonomía personal. Igualmente, se asesora a las féminas sobre todos los recursos existentes en el entorno más cercano y se las deriva a los servicios de atención y ayuda que proceda en función de sus necesidades y demandas.