vitoria. Con algo de retraso respecto a la fecha inicialmente prevista, pero el Ayuntamiento de Gasteiz se reunirá esta misma mañana con la plataforma Kaleratzeak Stop Araba para compartir sus impresiones sobre este drama social, el de los desahucios, que tantas páginas negras está acaparando al calor de la crisis económica. La cita tendrá lugar a las 10.30 horas en la sede de la Alcaldía vitoriana y en ella tomará parte la concejal responsable de Seguridad Ciudadana, Marian Castellanos, y al menos dos miembros del colectivo anti desahucios.

El objetivo de la plataforma pasa por arrancar del Gabinete de Javier Maroto el compromiso de que la Policía Local y los Bomberos no colaborarán en las ejecuciones hipotecarias que puedan darse en un futuro en la ciudad, tal y como ya ha sucedido en otras localidades del Estado a petición de sus alcaldes. Esta misma cita estaba prevista para el pasado jueves 11, pero finalmente fue cancelada a última hora por el Consistorio alegando que la edil popular se encontraba enferma.

A pesar de que la plataforma no obtuvo respuestas tras la suspensión de este encuentro, varios de sus miembros acudieron ese mismo día al Ayuntamiento e hicieron llegar a Castellanos ésta y otras exigencias por escrito, a través de su secretaria. En concreto, Kaleratzeak Stop solicitó al Consistorio vitoriano que "no utilice servicios públicos en beneficio de intereses privados especulativos", en alusión a las entidades bancarias que impulsen las ejecuciones hipotecarias, y que "defienda los derechos humanos y los preceptos básicos de la Constitución y la normativa europea" no obligando al personal de Seguridad Ciudadana a intervenir en los lanzamientos de las primeras viviendas.

Por último, el colectivo pidió al Consistorio que si finalmente decide que la Policía Local y los Bomberos deben seguir interviniendo en las ejecuciones hipotecarias al menos no sancione administrativamente a ningún funcionario que ejerza su derecho a la objeción de conciencia y se niegue a tomar parte en ellas. Una exigencia irrenunciable a juicio del colectivo, porque tiene el respaldo legal necesario y también cuenta con antecedentes en otras localidades.

Tras hacer entrega de sus reivindicaciones, los miembros de la plataforma advirtieron de que deseaban una respuesta inmediata a estas peticiones, que en ningún caso sobrepasase el plazo de dos semanas. Así se lo hicieron saber, de hecho, a la propia secretaria de la concejala. Aunque este plazo todavía no habrá expirado hoy, los representantes de Kaleratzeak Stop esperan, al menos, alguna pista sobre la actitud que tomará el Ayuntamiento y sus funcionarios ante posibles e inminentes desahucios.

Kaleratzeak Stop Araba, que sigue moviéndose en distintos frentes con el objeto de poner fin a los desahucios en el territorio, no descarta seguir recurriendo a otras medidas de presión como los escraches para lograrlo. Así, el colectivo quiso desmarcarse ayer de las declaraciones de la coordinadora de Stop Desahucios Bizkaia, Marta Uriarte, quien señaló que esta plataforma -ajena a Kaleratzeak Stop Araba- ha decidido desmarcarse "completamente" de este tipo de protestas para evitar así que se les relacione con prácticas violentas. El primer escrache celebrado en Vitoria tuvo lugar también la semana pasada ante la sede del PP en la calle Olaguíbel, con un éxito notable, y no sería extraño contar próximamente con alguna nueva iniciativa de estas características.