vitoria. Embolsarse este año 21 millones de euros con la venta de suelo municipal parece mucho pedir. Ya alertó en su informe el interventor del Ayuntamiento de Vitoria de que con la actual situación de crisis económica y la de este mercado "difícilmente" se conseguiría en 2013 la entrada efectiva de semejante cantidad, contemplada en el balance de ingresos de Ensanche 21. Y aunque el gabinete de Javier Maroto restó importancia a la advertencia, la preocupación impera en el seno del Consejo Social. El máximo órgano de representación ciudadana en Gasteiz ha pedido al Consistorio que elabore una agenda que determine qué obras y proyectos de todos los contemplados en el Presupuesto son los prioritarios "para saber cuáles quedarán sin ejecutarse" si al final no llega todo ese dinero previsto que tan bien cuadra ahora las Cuentas.

La experiencia de años previos dice que esos 21 millones de euros no se materializarán, por lo que el Consejo Social no entiende que otra vez el Presupuesto tropiece en la misma piedra ligando inversiones a venta de suelo. Muchas veces ha solicitado al Consistorio que cuente seguro con los dineros necesarios para encarar las pequeñas y grandes obras previstas antes de darlas por hechas. Y ayer, en la presentación de su informe sobre el proyecto presupuestario de 2013, volvió a hacerlo. "Es necesario asegurar el funcionamiento de los planes de viabilidad a corto y largo plazo ya existentes para acometer los proyectos estratégicos y sólo iniciarlos cuando estén garantizados los ingresos", subrayó el presidente del organismo, Miguel Ángel Ruiz.

Al no tener otros datos que no sean los del informe del interventor municipal, el Consejo Social trasladó sus dudas a los grupos políticos "para que aclaren públicamente" el escenario al que se podría enfrentar el Ayuntamiento y la ciudad de no obtenerse los ingresos presupuestados. Respecto a los errores ya cometidos, el llamado foro de sabios de la ciudad instó al Ayuntamiento a "que no repita actuaciones de años anteriores y dejen de ejecutarse gastos previstos para este ejercicio". Su reivindicación es que "se recupere lo no invertido en los dos años anteriores".

participación Todo lo que cuenta en su informe el Consejo Social lo hace por boca de los consejos sectoriales y territoriales de Vitoria. Por primera vez, el estudio se ha realizado recabando las opiniones y propuestas de los distintos órganos de participación ciudadana. Una iniciativa que los participantes han valorado como "positiva", aunque también han criticado el "escaso periodo de tiempo" ofrecido para desarrollar el proceso. El Consejo Social también destacó las reuniones con el edil y la directora de Hacienda, así como las facilidades para obtener el informe del interventor. Sólo le ha quedado una espinita clavada: recibir la comparación del presupuesto ejecutado de 2012 para contrastarlo con el borrador de 2013.

Satisfecho al menos por que este año sí habrá Presupuesto gracias al pacto PP-PNV, el Consejo Social confió en que ambos grupos tengan "apertura de miras" ante el plazo de alegaciones ciudadanas que se abre ahora así como a las propuestas de este organismo. En el área de Servicios Sociales, se alegra de la recuperación de partidas desaparecidas en 2011 aunque echa en falta cuantías destinadas a la prevención de situaciones de exclusión. Respecto a Juventud, solicita que parte de la ponencia de empleo priorice a este colectivo. Dentro de Cooperación al Desarrollo, aplaude la aprobación del 0,7% aunque recuerda que "el objetivo debe ser el 1%" firmado por el Ayuntamiento en el plan director. En cuanto a Cultura, insta a que se priorice a las asociaciones y artistas locales. Y en Medio Ambiente, se pide habilitar una partida para la puesta en valor del arbolado urbano, una línea de subvenciones para las asociaciones protectoras de animales, partidas para potenciar el uso de la bici, así como campañas educativas de este medio de transporte.

Para los barrios, se plantea más inversión en la vía pública, la mejora del transporte público, una atención especial a los barrios de oro y más ayudas a la rehabilitación de edificios, eliminación de barreras arquitectónicas y a la eficiencia energética. Son peticiones que proceden de las propias asociaciones vecinales, que también lamentan la reducción por segundo año consecutivo de las partidas destinadas a facilitar su actividad. La cuantía destinada al comercio local, no obstante, sí le parece razonable al Consejo Social, aunque advierte de que al reducir el gasto corriente y de inversiones muchas empresas sufrirán. Respecto a Accesibilidad, se respaldan las peticiones de las asociaciones del ámbito. Y en Igualdad, persiste la solicitud de confección el Presupuesto con enfoque de género.