gasteiz. Cada 8 de marzo, siempre se pide pasar "de las palabras a los hechos", pero siempre imperan las primeras. Ayer, Día Internacional de la Mujer, instituciones, partidos, sindicatos y movimientos sociales coincidieron en la necesidad de seguir trabajando en el seno de la sociedad para avanzar en la igualdad entre hombres y mujeres, pese a lo ya conseguido hasta ahora. Logros que en algunas casos se tambalean con la crisis económica, que se está cebando especialmente con la población femenina.
En el Parlamento Vasco, su presidenta, Bakartxo Tejeria, leyó una declaración no institucional, ya que EH Bildu se opuso a suscribirla, al considerar que ha llegado el momento de "pasar de las palabras a los hechos" para que las políticas de igualdad estén "en el centro de la actividad política" vasca. El texto que leyó Tejeria abogó por la igualdad, celebró los avances conseguidos hasta ahora, como lo demuestra "la amplia representación de mujeres" con que cuenta la Cámara autonómica, aunque reconoció que aún queda un largo camino por recorrer. En este sentido, denunció la escasa presencia de las mujeres en los ámbitos de decisión, la desigualdad laboral, la violencia contra las mujeres o su mayor dedicación a las tareas domésticas.
Bien lo saben los colectivos feministas que se concentraron a las 12.30 horas frente al Parlamento vasco para reclamar que se dé "un valor económico" a "todos los trabajos que son necesarios para la sociedad y que están recayendo, hoy más que nunca, en las espaldas de las mujeres".
La concentración, convocada por la plataforma feminista Marcha Mundial de Mujeres de Euskal Herria , lució un significativo lema: Nos sobra trabajo, nos falta empleo digno. La representante del colectivo, Miren Aranguren, explicó que el acto de protesta se había hecho coincidir, además de con el Día de la Mujer, con el pleno monográfico sobre empleo que se desarrolla en el Parlamento Vasco. En este sentido, señaló que cuando el movimiento feminista habla de trabajo no hace alusión únicamente "al que se da en el sistema productivo asalariado", sino que "el trabajo es algo mucho más amplio".
"Tenemos que tener en cuenta y darle un valor económico a todos los trabajos que son necesarios para la sociedad y que están recayendo, hoy más que nunca, en las espaldas de las mujeres", explicó Aranguren. Asimismo, reivindicó que los debates en sede parlamentaria y los cambios que se propongan desde los distintos gobiernos "no sean en el sentido que están siendo, de recortar derechos y beneficiar al capital, sino que sean para poner en el centro la vida y las necesidades y deseos de todas las personas".
Por su parte, el Ararteko, Íñigo Lamarca, pidió a las instituciones vascas que den prioridad a las mujeres en sus políticas sociales, ya que la crisis está teniendo especial incidencia en las mujeres y se ha incrementado la "feminización de la pobreza". También alertó de que la crisis ha obligado a las mujeres hacerse cargo de personas mayores necesitadas de cuidados, así como de dependientes y niños, lo que dificulta aún más su retorno o incorporación al mercado de trabajo.
Todo ello redunda, según Lamarca, en "un notable incremento de la feminización de la pobreza". De ahí la necesidad de que los poderes públicos vascos reconozcan el impacto de género de la crisis y actúen consecuentemente. Con este fin reclamó que, además de profundizar en las medidas de igualdad ya existentes, las instituciones activen nuevas políticas para "empoderar a las mujeres económica, cultural y socialmente, para que puedan erigirse en agentes sociales estratégicos y hacer frente a los nuevos retos" sociales.
El Día Internacional de la Mujer siguió sintiéndose en la calle por la tarde. A las 20.00 horas, Vitoria acogió una manifestación desde la plaza San Antón, que mostró la fuerza de las féminas y sus ganas de seguir luchando por la igualdad. También hubo una marcha en Bilbao, organizada por colectivos y asociaciones feministas, que partió a las 19.30 horas de la plaza de Arriaga para recorrer el centro de la ciudad.
También las redes sociales se hicieron eco de la efeméride. Miles de mujeres se felicitaron por su día, más unidas que nunca.