Vitoria. Pocas veces lucen transparentes desde que se colocaron en los cantones de la Soledad y San Francisco Javier. Las rampas mecánicas del Casco Viejo han dado desde su instalación más de un quebradero de cabeza a los sucesivos gobiernos municipales. Primero por los actos vandálicos de quienes estrellaban su ira contra los cristales, después por la suciedad del vanguardista diseño. Y es que, desde el principio, el Ayuntamiento no tuvo en cuenta el mantenimiento de la instalación. Primero fue la Agencia del Casco Viejo quien asumió el trabajo, con limpiezas más bien escasas, pero con la desaparición de la Arich nadie se hizo cargo. y al margen de algún lavado de cara puntual o de la retirada de hojas en otoño, lo cierto es que las rampas han presentado un aspecto descuidado. Ahora, la situación cambia, ya que por primera vez se ha decidido contratar a una empresa para que de forma regular limpie las escaleras.

El servicio de limpieza corresponde desde el pasado miércoles a la firma Berezi 99 Garbiketak-Lerezaintza, una empresa de inserción de personas en situación de riesgo de exclusión, que ayer ya se afanaban en su tarea para garantizar el correcto mantenimiento de la instalación, más allá de un mero lavado de cara. Una labor que costará al Ayuntamiento 22.786 euros anuales, después de la baja del 8,85% presentada por la ahora adjudicataria.

La limpieza se realizará cada mes en los tapices mecánicos, pasamanos, cristalería del pasamanos y barandillas exteriores. Además, cuatro veces al año, una por trimestre, se quitará la suciedad tanto de la estructura de los cristales laterales como del techo que cubre las rampas, según especifica el contrato. En total, 1.232 metros cuadrados de cristalera lateral y 550 de techo en el cantón de la Soledad. Estas escaleras están divididas en cuatro tramos: entre Herrería y Zapatería, Zapatería-Correría, Correría, plazoleta y de ahí a Fray Zacarías. Por su parte, los cristales laterales de las rampas de San Francisco Javier tienen una superficie de 862 metros cuadrados a los que hay que sumar los 445 de techo. En este cantón, la estructura está dividida en tres tramos: de Pintorería a Cuchillería, de la Cuchi hasta la mitad del tramo del cantón y de ahí hasta la calle Las Escuelas. Para eliminar los residuos de todos los elementos que conforma el sistema mecánico no podrán utilizarse productos demasiado tóxicos y dañinos para el medio ambiente. Además, la limpieza deberá ser manual, evitando el uso de agua a presión para que no se estropee la maquinaria que hace funcionar las rampas.