labastida. Por vez primera, el Consistorio de Labastida ha salido al paso de las numerosas informaciones habidas en torno al supuesto maltrato de animales en ese municipio, a través de un comunicado. "Este ayuntamiento quiere exponer a la opinión pública que en fecha 15 de enero de 2013 se solicitó la colaboración y cooperación de la Ertzaintza para realizar las labores de Policía administrativa, de informe e identificación de las personas responsables del presunto maltrato animal denunciado a través de los medios de comunicación escrita", expone la nota.

Resultado de la citada colaboración es la emisión de un "informe de comprobación de la situación" en la que se encuentran los animales objeto de la denuncia por parte del Servicio de Ganadería de la Diputación, asistido por los Miñones. Este informe aprecia que en el momento de la visita de inspección, los animales se encuentran en buen estado y tienen comida y agua a su alcance; esto es, "que no hay indicio de maltrato animal". Afirmación que no es muy real, ya que fue la patrulla verde de Mioño quien realizó la inspección. Sí se comprobó fue "la posesión de animales sin la debida identificación y registro, e irregularidades administrativas frente a las cuales ya se han incoado las acciones oportunas".

En cuanto a la desaparición de Rex, el pitbull propiedad de una joven logroñesa, se señala que "en relación con la denuncia presentada ante este ayuntamiento el dia 6 de marzo de 2013 por el presunto robo de un perro y presunta realización de peleas ilegales de perros, en fecha 7 de marzo de 2013 este ayuntamiento ha remitido la citada denuncia a la Ertzaintza dado que se refiere a la investigación de la comisión de delitos o faltas para lo cual este ayuntamiento no tiene competencia". "De cualquier modo, este ayuntamiento ya ha incoado las acciones administrativas pertinentes para la sanción de las posibles infracciones por vulneración de la legislación de tenencia de perros potencialmente peligrosos,".

El Consistorio asegura que "no le constan" peleas de perros ni la realización de actos clandestinos de adiestramiento para tales fines.