vitoria. El Departamento vasco de Seguridad volvió ayer a activar el aviso amarillo -intermedio a la hora de definir fenómenos meteorológicos adversos en la CAV (Comunidad Autónoma Vasca)- por nieve para la pasada noche. No en vano, se esperaban nevadas a partir de 500 metros de altura. Tras el temporal de frío y nieve de los últimos días, se habían anulado las alertas climáticas, pero se volvieron a poner en marcha desde las seis de la tarde de ayer hasta las nueve de la mañana de hoy porque en el territorio histórico, la cota estaba entre los 500 y los 700 metros. Y eso, en lenguaje de calle, podía significar la llegada de nuevas nevadas, por ejemplo, a la capital y a la Llanada oriental.

Dadas las circunstancias, desde la Diputación Foral de Álava se decidió mantener activado en fase de emergencia el Programa Operativo de Vialidad Invernal. Ello supuso el trabajo de 17 operarios y de seis equipos quitanieves en toda la red principal de carreteras. En su quehacer se encontraron, por ejemplo, con el puerto de Orduña cerrado por riesgo de avalanchas. El resto de hitos y puertos de montaña permanecieron dentro de la normalidad.

En otro orden de cosas, los Bomberos gasteiztarras tuvieron que intervenir en las últimas horas en una treintena de casos para retirar la nieve acumulada en tejados y el hielo generado como consecuencia de las bajas temperaturas vividas en el presente episodio invernal.

Intervenciones de Bomberos Aprovechando estas intervenciones, los integrantes del retén gasteiztarra también retiraron tejas sueltas del número 13 de la Avenida Gasteiz, donde dieron aviso a la comunidad de propietarios para que revisase el alero. Entre las actuaciones, también se tuvo que asegurar un trozo de baldosa de un balcón en el Bulevar de Mariturri, lugar al que tuvieron que volver por la tarde para revisar todos los balcones, porque se había desprendido otro azulejo. Aparte, se aseguró un canalón del colegio Luis Elejalde, que estaba medio suelto y con riesgo de caer al patio del centro escolar.