vitoria. Los resultados del alumnado vasco devuelven la dimensión académica a la deriva ideológica que alimenta la reforma educativa del ministro Wert que, empeñado en "españolizar" a los niños como antídoto al fracaso escolar del Estado, quiere convertir Lengua castellana en la única troncal, relegando al resto de lenguas cooficiales al bloque de materias de especialidad. Todas las evaluaciones internas y externas demuestran que en Euskadi no hay ningún chaval que salga del sistema sin saber español -está en la media de España- aunque no todos alcanzan un nivel intermedio de euskera (el 24,5% en D, el 41,7% en B y el 85,7% en A tienen un nivel mínimo). El último Informe de Resultados de las Pruebas de Acceso a la Universidad 2012 da un paso más allá y desvela que los estudiantes que hicieron la última Selectividad en euskera fueron mejores que los de la rama de castellano en el examen de Lengua castellana y Literatura.
Este documento, publicado por la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), expone que el alumnado euskaldun no solo sacó una nota media en Lengua y Literatura castellana por encima de la media de los 8.440 estudiantes que se presentaron a la convocatoria ordinaria de la Selectividad en junio, sino que obtuvieron una calificación superior a la de los compañeros que usaron el castellano. En concreto, el alumnado euskaldun sacó una nota media en esta prueba de 5,96 por 5,80 que logró el alumnado castellanoparlante. El porcentaje de estudiantes que aprobó el examen también fue tres puntos superior entre los euskaldunes (el 77,04% de aprobados frente al 74,71% de la rama de castellano). Las notas atendiendo al resto de los parámetros (sexo, titularidad del centro) se comportaron como suele ser habitual: las chicas sacaron mejor nota en Lengua castellana que los chicos y los estudiantes de la red concertada respecto a los de la pública.
En el examen de Lengua y Literatura vasca de la última Selectividad no se rompió la tónica de las últimas tres ediciones de las que existen resultados. Como cabría esperar, el alumnado euskaldun fue muy superior a sus compañeros de castellano. En concreto los de la rama de euskera sacaron una nota de 8,03 puntos de media frente al 6,01 logrado por los castellanoparlantes, por debajo de la media, que se situó en una nota de 7,29. Aquí, los bachilleres de los centros públicos fueron superiores a los de los concertados, y las chicas a los chicos.
Aunque no está relacionada, la destreza demostrada por el alumnado euskaldun en Lengua castellana está en la línea de las conclusiones de la investigación realizada por el ISEI-IVEI sobre la influencia de la lengua de las prueba en las evaluaciones internacionales, en base a los resultados obtenidos por el alumnado del modelo B (bilingüe) y D (de inmersión euskera). Este estudio pretendía corroborar la hipótesis de que cuando la lengua familiar coincide con la de la prueba, el alumnado es capaz de demostrar más plenamente sus aprendizajes. Por un lado, el experimento confirmó que el alumnado del modelo D cuya lengua familiar es el euskara "es capaz de demostrar las competencias adquiridas por igual en euskara y en castellano". Y además, que el alumnado castellanoparlante del modelo D obtiene una puntuación significativamente más alta cuando realiza la prueba en castellano.
Los datos apuntan a "la conveniencia de realizar la prueba en la lengua familiar", especialmente en el caso del alumnado de lengua familiar castellano de modelo D, que a pesar de que adquiere adecuadamente los conocimientos en una segunda lengua "logra mejores resultados cuando puede mostrarlos en castellano". El ISEI-IVEI subraya que el alumnado de lengua familiar castellano ha demostrado que cuando ha realizado la prueba en esta lengua se deriva que la adquisición de conocimientos en la segunda lengua (euskara) está garantizada. "Su nivel competencial es equivalente al de sus compañeros y compañeras en los que coincide la lengua familiar y la de instrucción (euskara)", afirma el ISEI-IVEI. Las conclusiones de este estudio son claves ya que con la Lomce, el Ministerio de Educación establecerá para todo el sistema los criterios y las características -está por ver si el idioma también- de las evaluaciones externas en Primaria, ESO y Bachillerato.
Tras la última reunión con las Comunidades Autónomas, el ministro de Educación, José Ignacio Wert, se mostró abierto a que las lenguas cooficiales tengan idéntico trato en horas que las troncales (Lengua y Literatura castellana), pero no estatus de troncal, como le solicitó la consejera vasca de Educación, Cristina Uriarte. En la comparecencia posterior a esa última Conferencia Sectorial de Educación, Wert aseguró que las lenguas cooficiales van a tener el mismo tratamiento que el castellano y el resto de asignaturas troncales en carga lectiva en la Lomce, de manera que se va a aclarar de "forma satisfactoria" la controversia generada en Catalunya o Euskadi.
Según Wert, "ha habido una mala interpretación de los bloques de asignaturas" e insistió en que troncalidad no significa que la asignatura tenga una mayor importancia que el resto, sino que la define el Estado. "Se hace difícil que la lengua cooficial se integre entre las troncales, pero sí que vamos a recoger en el texto que éstas tengan el mismo tratamiento", afirmó el ministro.
La idea que baraja es intentar encontrar una denominación diferente a la de 'especialidad' para las lenguas cooficiales que "dé respuesta a la inquietud de las comunidades autónomas" y que girará en torno a su "carácter autonómico". En este sentido, aseguró que si se quiere considerar el carácter troncal de estas materias, al final sería el Estado el que evaluaría y definiría el currículo, algo que está, a su juicio, "en las antípodas de lo que pueden desear las comunidades autónomas".
Imagen tomada durante uno de los exámenes para poder acceder a la universidad. Foto: Jose Mari Martínez
El porcentaje de quienes aprobaron el examen también fue tres puntos superior entre los euskaldunes
En el examen de Lengua y Literatura vasca el alumnado euskaldun fue muy superior a los de castellano