La Diputación alavesa ha aprobado una normativa que regula las quemas de residuos agrícolas en los terrenos rústicos, con el objetivo de resolver el problema de los fuegos no controlados, ya que un porcentaje importante de los mismos tiene su origen en las quemas incontroladas de restos de podas o de fardos de paja. La nueva normativa "simplifica los trámites de autorización de permisos, con el fin de lograr un mayor control y reducir los incendios forestales originados por esta práctica".