Vitoria/Madrid. El ministro de Educación, José Ignacio Wert, respondió ayer a las críticas que está levantando el borrador de la nueva ley educativa como el ministro acostumbra, añadiendo más leña al fuego con titulares originales. Ayer, en una conversación informal con los periodistas durante la recepción celebrada en el Senado con motivo del 34 aniversario de la Constitución, Wert afirmó que él es "como un toro bravo que se crece con el castigo. El titular de Educación que la reforma educativa no ataca la inmersión lingüística porque en todo momento se ciñe a la doctrina del Tribunal Constitucional, el Tribunal Supremo y el propio Estatuto catalán.

En su diálogo con los informadores a Wert también se le preguntó sobre la conversación que había mantenido durante la recepción con el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, después de que éste insinuara minutos antes de que al ministro no le había sentado bien las declaraciones que hizo este miércoles en RNE, donde acusó al PP de "hacer ideología" con una ley educativa "retrógrada". A este respecto, Wert, quien dejó claro que el diálogo con Rubalcaba fue en un tono jocoso, reveló que cuando el líder socialista le preguntó cómo se encontraba, se limitó a contestarle: "Superando tu entrevista".

Bastante más seria se volvió a mostrar ayer, la consejera vasca de Educación en funciones, Isabel Celaá, entrevistada en radio Euskadi. La consejera, que apura sus últimos días al frente de la cartera de Educación, insistió en que el anteproyecto de ley es una propuesta "absolutamente anticuada, absolutamente intervencionista y, desde luego, segregadora". Además aseguró que "invade competencias" y que, por tanto, "hay base" para presentar un recurso ante el Tribunal Constitucional.

Desde su punto de vista, pese a las apoyas que se están levantando respecto al euskera, "el tema de la lengua se va a acabar arreglando" y que "aunque falta todavía que las lenguas oficiales sean consideradas troncales y no asignaturas de especialidad, ciertamente creo que ese asunto va a acabar arreglándose". Según advirtió, "importa concentrarse en los otros temas" porque, a su juicio, con el de la lengua "se está pretendiendo cubrir absolutamente todo lo demás que lleva la propuesta, que es una propuesta que para nada es apropiada a lo que significan las medidas que adoptar una educación contemporánea".

Celaá aseguró que el borrador de la LOMCE "invade competencias" porque el sistema hasta ahora era de "reparto competencial" y es la propia Constitución la que, "por primera vez, abre en la educación el acceso a las lenguas cooficiales del sistema en régimen de igualdad con el castellano". En este sentido, calificó de "absolutamente falso" el mensaje que se ha trasladado de que el Estado solo tiene que "ocuparse" de la lengua común, porque también lo tiene que hacer de las cooficiales. "Hasta ahora venían teniendo el mismo tratamiento, el mismo rango en toda la legislación vigente y ahora él lo ha diferenciado no sé si consciente o inconscientemente", añadió.

En relación al reparto competencial, comentó que "el que se guardar para si" los criterios de evaluación y los contenidos de las pruebas "se guarda para si todas las competencias". "Esto es lo que trae la propuesta de Wert", señaló.

Celaá afirmó que, si es el Estado quien define las materias troncales que deben de ser más del 50 por ciento del currículum y el es el Estado el que establece las pruebas y los contenidos y los criterios de evaluación, "se reserva todo" y los centros educativos quedan convertidos "en academias preparadoras para esas revalidas".

"VACIAR COMPETENCIAS" A su juicio, eso es "vaciar absolutamente" la competencia de las comunidades autónomas y "casi" no harían falta ni consejeros de Educación en las autonomías. Según Celaá, es "contrario a todo lo que significa la calidad en un sistema educativo".

La consejera de Educación manifestó que en esta propuesta "se confunde conscientemente lo que es la obligación del Estado de conocer cómo está el sistema educativo en cada momento, para lo cual se requieren evaluaciones, con lo que es la evaluación de cada alumno que corresponde a cada centro educativo y a cada administración autonómica". "Por eso decimos que es una propuesta absolutamente anticuada, absolutamente intervencionista y es segregadora", aclaró la titular de Educación.

En su opinión, la filosofía de esta propuesta es "antagónica" a la de la LOE e insistió en que, si lo que pretende el ministro y el PP "se lleva a término", se contará con una legislación en materia educativa "muy incoherente".

Celaá indicó que la LOE se basaba en la "equidad" y la LOMCE apuesta por "identificar los supuestos talentos de entrada y desarrollar cada uno por su lado". "Si un niño muestra una debilidad a los 13 ó 14 años, se muestra no tan diestro para las materias más académicas, automáticamente se le pone en un itinerario de Formación Profesional básica", aseguró. A su juicio, es "completamente inaceptable" y las familias deberían estar "preocupadas" por este tema. "Toda la segregación en la escuela, se convierte en segregación en la sociedad, tiene repercusión. No todos los niños no tienen la misma velocidad a la hora de desarrollar sus destrezas y han de tener las mismas oportunidades para hacerlo", añadió.

Celaá indicó que su modelo es el finlandés, el que afirma que los alumnos deben tener un "territorio común" hasta los 15 ó 16 años y no pueden ser "discriminados a una edad temprana". Por otra parte, Celaá hizo balance de la legislatura e indicó que, a nivel personal, se va "con satisfacción" porque las "piezas están colocadas sobre la mesa". Dna/V.P./E.PRESS