Vitoria. Las carreteras de Álava se vistieron ayer de luto. Un transportista de Lugo de 54 años falleció pasada la medianoche del martes, a las 0.30 horas, tras salirse de la calzada y volcar el camión que conducía en la N-I, a la altura de Iruña Oka, en sentido a Irun. El conductor quedó atrapado en el camión y, según informó el Departamento vasco de Interior, falleció prácticamente en el acto, como consecuencia de las lesiones sufridas por el aparatoso accidente.
¿Por qué sucedió? La Ertzaintza sigue investigando el caso, con el fin de esclarecer las circunstancias que llevaron al fallecimiento del camionero. No obstante, los sindicatos creen que la razón podría estar en una posible falta de seguridad de la zona. ELA, LAB, STEE-EILAS, EHNE e Hiru recordaron que ya son cuatro las muertes en accidente laboral de profesionales del transporte en las carreteras de Euskadi. Por eso, mañana se concentrarán frente a la Diputación alavesa, en solidaridad con la familia del fallecido, para reclamar a las administraciones que no ahorren "ni un solo euro" en la mejora de la seguridad de las infraestructuras viales.
"Es imprescindible mantener las actuales carreteras en óptimas condiciones para garantizar la seguridad de los ciudadanos en general y de los transportistas en particular", advirtieron los sindicatos. Además, exigieron que se habiliten "de una vez por todas áreas de servicio dignas, públicas y seguras", en las principales carreteras del territorio para que quienes trabajan con el volante puedan cumplir la ley en cuanto a horarios de conducción y de descanso. Ahora mismo, no siempre es posible hacerlo cumpliéndose estas condiciones.
La reivindicación de los sindicatos fue acompañada de recomendaciones para los profesionales del sector. Estas cinco organizaciones emplazaron a los camioneros a actuar "con responsabilidad" y a "ser exigentes con las condiciones de trabajo bajo las que contratan sus servicios". Cuando el volante es el modus vivendi de una persona, la vida está especialmente en juego. Y más aún, si las condiciones climatológicas se ponen peliagudas, como va a suceder en lo que queda de semana.
La Diputación ya ha advertido de la necesidad de llevar cadenas en los puertos de Azaceta y Opakua. Herrera, además, anocheció cerrado. Y todo indica que hoy habrá que seguir extremando las precauciones.