Madrid. Como no podía ser de otra manera, la crisis se volverá sentir, y mucho estas navidades, ya que un año más los hogares tendrán que volver a apretarse el cinturón. De hecho, cada familia destinará este año una media de 680 euros a sus compras de Navidad, lo que representa un descenso del 3,9% respecto al año anterior, en una campaña tan marcada por la crisis que por primera vez el regalo más deseado entre los adultos será el dinero en efectivo. En concreto, los hogares reducirán un 6,7% el presupuesto destinado a ocio (las tradicionales cenas navideñas y fiestas), hasta 99 euros; mientras que el recorte del gasto será menor en regalos (-4%) y productos de alimentación (-2,6%).Estas dos últimas partidas concentran la mayor parte del presupuesto navideño, con 301 euros y 279 euros, respectivamente, según recoge el estudio sobre hábitos de consumo en Navidad que realiza anualmente Deloitte. Los socios de la consultora Juan José Roque y Victoria Larroy destacaron en rueda de prensa que el gasto de las familias en Navidad ha caído entre un 20% y un 25% desde el inicio de la crisis.

El descenso del consumo estimado para este año se produce en un contexto de "cierto nivel de pesimismo" y preocupación sobre la situación económica. De hecho, España figura entre los países en los que la bajada es más acusada, junto a Italia (-4%), aunque ambos por debajo del desplome del gasto en Grecia (-16%) y Portugal (-13%).

No obstante, se mantiene en el 'top 5' de países que más gastan en esta época del año, si bien ha bajado de la cuarta a la quinta posición, por detrás de Irlanda, Suiza, Luxemburgo y Finlandia. El gasto medio en Europa bajará este año un 0,8%.

El cerebro mandará El estudio, realizado a través de encuestas a unos 18.600 europeos (1.800 españoles) en el mes de septiembre, pone de manifiesto que los sentimientos han perdido relevancia y será "el cerebro el que mande" a la hora de comprar. Así, el precio será un factor determinante, mientras se consolidan hábitos como la compra de regalos útiles y de productos de marca de la distribución.

Según el informe, el dinero en efectivo se posiciona por primera vez como el regalo más deseado entre los adultos españoles, junto a los libros, la ropa, los viajes y los ordenadores. Los obsequios más comprados para adultos serán la ropa, los libros y los perfumes, mientras que el dinero escala siete puestos y se posiciona en sexto lugar entre lo más regalado.

En el caso de niños y adolescentes, la ropa y los zapatos escalan 10 y 15 puestos, respectivamente, en el 'ranking' de regalos más comprados estas Navidades, hasta posicionarse en segundo lugar para los niños, tras los juegos educativos, y en tercera posición para los adolescentes, tras los videojuegos y los libros.

ropa y zapatos para niños y adolescentes En concreto, los obsequios más adquiridos en el Estado para niños son los juegos educativos, la ropa, las muñecas, los libros y los videojuegos, mientras que entre los adolescentes se colocan en primera posición los videojuegos, los libros, la ropa, el dinero en efectivo y las videconsolas, ha indicado Victoria Larroy, de la misma consultora.

En esta tendencia al pragmatismo también destaca en el estudio que el 61% de los entrevistados afirma que comprará más productos de segunda mano, frente al 13% del año pasado. Los autores del estudio estimaron que se puede tratar de compras de productos caros como tablets o 'smartphones' o de entradas para espectáculos, así como de otros artículos sin apenas estrenar a la venta en plataformas de internet como eBay.

El periodo fuerte de compra de regalos esta Navidad, según Deloitte, volverá a ser del 1 al 15 de diciembre, cuando casi el 40% de los consumidores buscarán regalos, mientras que el resto se repartirá entre noviembre y la segunda quincena de diciembre e, incluso, un 7% se esperará a después de Reyes para buscar mejores ofertas y rebajas.

También destaca que el consumidor considera que el entretenimiento y el ocio es el principal gasto del que podrían prescindir en caso de necesidad, seguido de los gastos en telecomunicaciones.

Los asociados con la salud, la educación y los gastos básicos (alimentación, luz, gas, etc...) son los elementos a los que los encuestados no quieren o no pueden renunciar.

Para el conjunto de los 18 países en donde se han entrevistado a 18.600 personas, en el marco del estudio, destaca por encima de todo la preocupación de los ciudadanos por la situación de crisis actual y que internet se usa para buscar y comparar, "pero compramos en la calle".