Madrid. Siete de cada diez adolescentes se conectan cerca de dos horas diarias a Internet, principalmente para escuchar música y conversar con amigos, una práctica en la que se inician los menores entre los seis y los nueve años. Según un estudio de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC), realizado con encuestas a más de 5.000 estudiantes de entre 12 a 17 años de centros educativos públicos y privados, cuatro de cada diez jóvenes reconoce haber aceptado invitaciones virtuales de desconocidos, una práctica más frecuente entre los chicos. Los jóvenes se conectan todos los días cerca de dos horas, aunque durante el fin de semana aumenta la media de tiempo hasta las tres horas. Relegan a un segundo término la búsqueda de información para los trabajos escolares, que es el principal motivo por el que los padres compran un ordenador personal a sus hijos.

El informe destaca que un 90% de los encuestados tiene al menos un perfil en alguna red social, y cuatro de cada diez adolescentes reconocen que les costaría mucho o les molestaría dejar de conectarse a su red social todos los días; una afición que se agudiza sensiblemente más entre ellas que entre ellos. Tuenti es la red más frecuentada, ya que un 70% cuenta con un perfil en esta marca; seguido de Facebook, con 6 de cada diez adolescentes suscritos, y de Twitter, con un 30% de los encuestados. La gran mayoría de los estudiantes de la ESO, el 70%, utiliza las redes para chatear con amigos que conocen físicamente y la mitad también las emplea para ver vídeos o fotos de amigos. El estudio también analiza los riesgos a los que se enfrentan en Internet. Un 40% reconoce que ha aceptado las invitaciones virtuales de desconocidos para unirse a su perfil y, de este porcentaje, 3 de cada 10 aseguran que aceptan a todo el mundo. Esta aceptación indiscriminada se produce en mayor medida los adolescentes de entre 15 a 17 y, sobre todo, entre los hombres (ellas se muestran más prudentes).

Los jóvenes aseguran que conocen los riesgos de posible manipulación que conlleva colgar vídeos y fotos en las redes sociales y, por esta razón, la mitad no realiza esta acción y, de la otra mitad, un 20% lo hace con algún tipo medida de seguridad. Otro de los riesgos analizados es la suplantación de la identidad, que han sufrido casi un 17% de los encuestados.