amsterdam. Un problema de comunicación entre un avión de la aerolínea española Vueling procedente de Málaga y la torre de control desató ayer una falsa alarma de secuestro en el aeropuerto de Amsterdam, que a primera hora de la mañana ya tuvo que ser parcialmente cerrado por el hallazgo de una bomba de la Segunda Guerra Mundial.
La alarma se desató cuando el vuelo, con 189 pasajeros a bordo, perdió el contacto con los controladores aéreos de Schiphol, lo que activó los protocolos de seguridad, que incluyen el envío de dos cazas F-16.
El piloto entró en el espacio aéreo holandés sin aviso, lo cual, unido a una "maniobra extraña" de la aeronave y a que no se podía establecer contacto, desató las alarmas. El incidente coincidió con una noticia publicada en medios paquistaníes de que dos jóvenes somalís radicales habrían estado preparando un atentado a gran escala en La Haya.