BILBAO. En concreto, el 33 por ciento de los parados no realizaría un trabajo por menos de 1.000 euros, un 20 por ciento más no lo aceptaría por un sueldo menos a 800 euros. Además, el 7 por ciento no haría un trabajo con un salario por debajo de 600 euros. Por el contrario, el 40 por ciento de los encuestado diría que sí al empleo independientemente de su retribución.
En el conjunto del Estado, el porcentaje de personas sin trabajo que no aceptaría un empleo con un sueldo inferior a los 1.000 euros desciende al 30 por ciento. Madrid (41%) y Cataluña (37%) son las comunidades autónomas con mayor porcentaje de desempleados que no trabajaría si la retribución es inferior a los 1.000 euros. En el extremo contrario se sitúan Canarias (13%), Galicia (18%), Andalucía (21%) y Aragón (21%).
Este indicador no presenta grandes diferencias por sexos ya que, en el caso de los hombres el porcentaje de los que no trabajaría por menos de 1.000 euros es del 34 por ciento, mientras que en el de las mujeres se sitúa en el 32 por ciento en Euskadi.
Por grupos de edad, la franja de 45 a 65 años es la que arroja un mayor porcentaje de parados que no trabajarían por menos de 1.000 euros, con el 54 por ciento. En el grupo de 35 a 44 años, el porcentaje es del 42 por ciento, mientras que en el grupo de 25 a 34 es del 32 por ciento y se reduce hasta el 12 por ciento en los jóvenes de 16 a 24 años.
MEJORAR LA FORMACION
La encuesta de Manpower indica también que el 66 por ciento de los desempleados en el País Vasco considera que mejorar su formación ampliaría sus posibilidades de encontrar trabajo, frente al 63 por ciento registrado hace un año. Los hombres valoran más la formación, un 67 por ciento, que las mujeres, con un 62 por ciento.
El 71 por ciento de los parados de 16 a 24 años consideran que una buena formación aumenta las posibilidades de encontrar empleo. Este porcentaje desciende hasta el 67 por ciento en el grupo de 45 a 65 y hasta el 64 por ciento en los colectivos de 25 a 34 y de 35 y 44 años.