Vitoria. Calor sofocante en Álava y también en el resto de Euskadi. Y a lo largo de las próximas horas, irá a más. De acuerdo con la previsión realizada ayer por la Dirección de Atención de Emergencias y Meteorología del Gobierno Vasco, se espera que los termómetros registren hoy hasta 38 grados, por lo que sus técnicos han realizado un llamamiento a la prevención por temperaturas máximas extremas. El bochorno se dejará caer con mayor intensidad en la zona cantábrica interior y en el eje del Ebro, mientras que en los territorios situados entre ambos puntos se disfrutará tan sólo de un grado menos de temperatura. La situación ha obligado al Departamento de Interior a lanzar la alerta naranja para dichas áreas. La zona costera permanecerá con aviso amarillo.
De forma paralela, Interior ha lanzado el aviso amarillo por temperaturas altas persistentes en todas las zonas. Es probable que las máximas y mínimas se sitúen hoy en torno a los 33 y 19 grados en la zona costera, 38 y 17 en la zona cantábrica interior, 37 y 17 en la zona de transición y 38 y 18 en la zona del eje del Ebro. Las alarmas continuarán vigentes mañana, con alerta naranja en las mismas zonas y previsión de hasta 39 grados en el eje del Ebro, aviso amarillo por temperaturas máximas extremas en la zona costera y también aviso amarillo por temperaturas altas persistentes en todas las zonas, con un incremento de un grado en las temperaturas máximas sobre las predicción del jueves.
Para combatir las altas temperaturas, la Dirección de Atención de Emergencias y Meteorología aconsejó ayer a la población beber abundantes líquidos, especialmente agua, para evitar el riesgo de deshidratación y no esperar a tener sed para beber. Se recomienda evitar las bebidas que contienen alcohol, cafeína o demasiado azúcar.
Además, se subraya la conveniencia de hacer comidas ligeras (ensaladas, gazpacho, verduras o fruta, entre otras), cerrar las ventanas y bajar las persianas sobre las que dé el sol aprovechando las horas de menos calor para ventilar y refrescar la casa, usar ropa adecuada, holgada, ligera y de colores claros, así como calzado cómodo y fresco y procurar no salir a la calle durante las horas de más calor. En el caso de que haya que salir al exterior, es recomendable llevar la cabeza cubierta, gafas de sol y buscar la sombra.
Si se hace ejercicio, debe practicarse en las horas de menos calor. Nunca hay que quedarse o dejar a una persona o animal en un vehículo estacionado y cerrado, aunque esté a la sombra. También hay que recordar que con 35 grados o más dentro de casa los ventiladores no evitan las posibles consecuencias para la salud derivadas del calor. Es conveniente recurrir a otros métodos para refrescarse, tales como duchas o baños fríos, o ir a un lugar cercano que tenga aire acondicionado. Es necesario cuidar de que los niños y personas mayores sigan estas recomendaciones, así como prestar atención a las personas que viven en su domicilio solas.