vitoria. Debilidad, fatiga, dolor de cabeza, falta de apetito, insomnio o calambres son algunos de los efectos negativos que las altas temperaturas pueden tener sobre la salud. Los responsables de Cruz Roja Álava, recordaron ayer que el cuerpo recurre a mecanismos para mantener una temperatura estable, pero que los días de calor intenso fuerzan al organismo a hacer un esfuerzo adicional. Ante la alerta emitida por el Gobierno Vasco, Cruz Roja subrayó la necesidad de adoptar medidas de prevención para evitar sustos. Entre ellas, utilizar ropa ligera, protegerse la cabeza y consultar al médico sobre medidas complementarias si se padecen enfermedades de riesgo y no automedicarse. En casa, debe evitarse que el sol entre directamente bajando persianas, toldos y cortinas). El aire acondicionado es aconsejable mientras no genere cambios bruscos de temperatura. "Si te encuentras mal, deja la actividad que estés realizando, busca un sitio fresco y pide ayuda" indicaron desde la delegación alavesa.