llodio. El sector turístico vasco ha empezado el año resentido por la crisis, pero la Consejería de Turismo del Gobierno Vasco confía en el atractivo de la Ruta del Txakoli, recientemente inaugurada en la comarca del Valle de Ayala y el Alto Nervión, para capear la situación económica y superar las cifras de visitantes logradas en 2011, que fue "el mejor año de la historia del turismo vasco", aseguró la viceconsejera de Turismo, Pilar Zorrila, en la presentación del nuevo producto turístico que, teniendo al caldo de los campos ayaleses como principal motor de empuje, se ha impulsado en Aiaraldea de cara a la época estival.

El acto, al que también acudió el vicepresidente de Aiaratur, Hernando Lacalle, así como diferentes alcaldes de la comarca de Aiaraldea y representantes de empresas y establecimientos hosteleros, tuvo lugar en el Hotel Balneario de Orduña. Y es que una de las tres experiencias ofertadas transcurre dentro de sus muros, a base de un circuito de vinoterapia.

No en vano, las estadísticas arrojan que el visitante tipo "son parejas de entre 35 y 50 años que buscan experiencias culturales y gastronómicas, a la par que actividades con las que puedan conectar con el lugar que visitan, conocer a sus gentes y cómo viven, y por eso se han diseñado estos paquetes diferenciados, respondiendo a la demanda del turista", subrayó Zorrilla, mientras Lacalle explicó que "esta medida se encuentra diseñada para el turismo interno y dirigida a grupos, que buscan itinerarios divertidos donde los protagonistas son ellos mismos".

En este sentido, la experiencia Con sabor a txakoli, dirigida a los más hedonistas, engloba las citadas sesiones de vinoterapia, más visitas a bodegas de txakoli con opción a catas nocturnas y menús especiales en torno a este producto. Por su parte, el paquete Tradiciones en familia está destinado a unidades familiares, y con él pequeños y mayores podrán visitar una bodega -con cata de txakoli o mosto, en base a la edad- y pasear entre viñedos, y luego acercarse a un caserío a conocer sus animales y participar en la elaboración de queso, para culminar en torno a una buena mesa.

Por último, la tercera experiencia, llamada Nacimiento del Nervión desde el cielo, está pensada para las personas con ansia de aventuras. En ella, los más osados tendrán la posibilidad de realizar vuelos en globo, parapente o paseos a caballo, entre otras actividades.