Vitoria. A pesar de la crisis y los recortes, las mejoras de la red viaria alavesa, unidas a las campañas de sensibilización y a las actualizaciones legislativas, continúan ofreciendo garantías de seguridad a las carreteras del territorio y obrando el milagro de contener el número de víctimas. Sin embargo, las estadísticas indican que durante los seis primeros meses del año en curso los fallecimientos registrados en suelo alavés han aumentado más de un 130%. Entre enero y junio de 2011, sólo se contabilizaron tres víctimas mortales en el territorio, mientras que en lo que llevamos de 2012 la cifra, durante el mismo periodo, asciende a siete fallecimientos según los datos de la Dirección de Tráfico del Gobierno Vasco. No obstante, las informaciones correspondientes al año pasado resultan más positivas, ya que Álava volvió a registrar el número más bajo de fallecimientos de toda la comunidad autónoma, con 11 víctimas. Bizkaia contabilizó 24 y Gipuzkoa, 25. Las cifras, en general, invitan al optimismo pero también alertan de que no hay que bajar la guardia.

A lo largo de 2006, se registraron 26 fallecimientos en Álava; en 2008, 19; en 2009, 8; y nueve en 2010. En 2011 se invirtió la tendencia a la baja y la gráfica retornó al número 11. Teniendo en cuenta la evolución del año en curso, al territorio sólo le resta un estrecho margen de cuatro víctimas para no rebasar la cota del año pasado. El Observatorio vasco de Seguridad Vial y Movilidad señala que, aunque a un ritmo menor que en ejercicios anteriores, la cifra de muertes en carretera continua recortándose en las carreteras de la CAV. Si en 2010 fueron 67 las personas que perdieron la vida en accidentes de tráfico -entre los datos recopilados por la Ertzaintza y las policías locales-, en 2011 su número se redujo en siete hasta quedar en 60.

continuidad En cuanto a 2012, la información actualizada al mes de junio indica que si bien las cosas no han mejorado con respecto al ejercicio anterior, al menos tampoco parecen haber empeorado. El volumen de muertes en las carreteras vascas durante los cinco primeros meses fue, exactamente igual que en 2011, de 27. En junio, lamentablemente, hubo que sumar tres decesos más, con lo que el saldo provisional asciende ya a 30 en toda Euskadi. El periodo comprendido entre abril y mayo ha sido el más preocupante del año con nueve víctimas mortales, un número superior a la media de otros meses.

El último accidente de cierta envergadura -aunque sin víctimas mortales- que tuvo lugar en Álava se registró el pasado cuatro de junio, cuando los dos ocupantes de un camión resultaron heridos tras volcar el vehículo en el que viajaban mientras circulaba por la carretera N-1. Los dos varones, de 26 y 62 años, sufrieron este siniestro a la altura del término municipal de Asparrena. El vehículo, un camión cisterna marca Mercedes-Benz, que transportaba leche, quedó volcado fuera de la vía tras salirse de la calzada y sus ocupantes fueron evacuados al Hospital de Txagorritxu con lesiones de carácter leve.

La información correspondiente a 2011 permite establecer un breve perfil de las víctimas en Álava. La mayor parte de ellas, seis concretamente, tenían entre 25 y 44 años y la práctica totalidad fueron varones -diez hombres y una mujer-. En cuanto a la ubicación dentro del vehículo, ocho fueron conductores, dos ocupantes y un peatón. El mes más negro en cuanto a la seguridad vial dentro del territorio fue octubre, con tres fallecimientos.