GASTEIZ. Estas son algunas de las principales conclusiones del sondeo del Gabinete de Prospecciones Sociológicas del Gobierno vasco sobre la percepción de la situación social, política y económica que tiene la ciudadanía. Unas conclusiones que explican que el desempleo, la economía y la política continúen liderando con mucha ventaja sobre el resto la lista de principales preocupaciones de los vascos.
Este estudio consolida la opinión negativa de los vascos sobre la evolución de la economía y la eleva a cifras récord absoluto desde el inicio de la crisis en 2008. Y es que el 75% de los encuestados califica la coyuntura económica de mala o muy mala frente a un 23% que dice que es buena, lo que representa un incremento y descenso de cinco puntos en relación con los datos de hace un año, respectivamente.
Esta percepción negativa sobre la economía arrastra también el análisis que los ciudadanos realizan sobre la situación social y política. Las opiniones negativas superan con creces a las positivas en ambos casos, aunque destaca el hecho de que el 60% de las personas preguntadas considere mala y muy mala la situación política en Euskadi tras un crecimiento de doce puntos porcentuales.
No es de extrañar que el desempleo y la economía lideren con mucha diferencia la lista de los problemas más importantes del País Vasco, mientras otros que hace años ocupan los primeros puestos tengan un peso testimonial como la violencia terrorista. El mismo patrón se reproduce cuando se pregunta a los vascos por sus problemas personales: mercado de trabajo y problemas económicas superan ampliamente al resto.
LA CRISIS EN LAS FAMILIAS
¨Cómo afecta la crisis económica a las familias vascas? Los encuestadores formularon esta pregunta y las respuestas revelan que uno de cada tres hogares vascos ha visto en los dos últimos años como uno o varios miembros perdían su empleo (37%). Otras consecuencias menos dramáticas pero generalizadas son la congelación del salario o pensión (38%) y la reducción de los sueldos (34%.
Además en casi una de cada cuatro familias uno o varios de sus miembros se vieron obligados a reducir su jornada de trabajo habitual (reducción de horas y/o días de trabajo, reducción de horas extraordinarias ).
En cualquier caso, y pese a estos datos, lo cierto es que este tipo de problemas son más frecuentes todavía en el resto de España. Así, por ejemplo, el drama del paro ha visitado en el último bienio a la mitad de las familias españolas y la congelación y recorte de los salarios y pensiones al 44% y 43% de las unidades de convivencia, respectivamente (datos de la encuesta que realizó el CIS en diciembre de 2011).
La encuesta está basada en la información recogida entre los días 29 de mayo y el 2 de junio, ambos inclusive, a través de entrevista individual mediante cuestionario estructurado y cerrado realizada a domicilio a 2.254 ciudadanos vascos mayores de edad (504 personas en Araba, 1.134 en Bizkaia y 616 en Gipuzkoa). El error muestral correspondiente al total de la muestra se cifra en un 2,11%.
