Vitoria. Las Juntas Generales respaldaron ayer que la factoría Cementos Portland Valderribas, ubicada en la localidad de Olazti, amplíe su actividad a la quema de residuos en sus hornos para emplear posteriormente esta materia como combustible. PP, PNV y PSE dieron luz verde a una moción en la que la Cámara alavesa insta al Gobierno de Navarra a que en la concesión de estas autorizaciones respete la legalidad vigente, y aunque en ella manifiestan su "preocupación por la necesaria preservación de la salud pública", también resaltan las "dificultades" que Euskadi y la comunidad vecina están pasando por el cierre de empresas y el "incierto futuro de otras". Portland, que está sufriendo la crisis en primera persona, ha insistido en varias ocasiones en que la valorización energética, nombre técnico de esta actividad, tendrá una incidencia directa en sus costes de producción y constituirá un punto de partida básico para sobrevivir a la coyuntura. Y en ello también insistieron tanto jeltzales, como populares y socialistas.

Los grupos, de esta forma, rechazaron otra moción apoyada por Bildu y EB en la que solicitaban la paralización de un proyecto que, según advierten, tendrá unas nefastas consecuencias sobre el medio ambiente. Se trata de una zona rodeada por todo tipo de producciones agrarias y ganaderas, distintivos y denominaciones de calidad e importantes espacios protegidos. Esta moción, que sí prosperó en la Cuadrilla de Agurain, está respaldada por el colectivo Hiru Mugak Batera, contrario a la incineración, y que ayer se concentró frente a la Diputación.