El atrio de la Catedral Vieja, corazón del Cassco Viejo gasteiztarra, se convirtió ayer en el recibidor en el que se agasajó a una delegación de arquitrectos alemanes muy interesados en la actividad de recuperación patrimonial que se está desarrollando a lo largo y ancho del territorio histórico de Álava. Los citados profesionales se encuentran visitando distintos lugares de la capital y de la Cuadrilla de Rioja Alavesa.