Vitoria. El número de nuevas infecciones relacionadas con el virus VIH en Euskadi se ha mantenido estable a lo largo de la última década, con una media de 175 casos por año. Sin embargo, la transmisión de la enfermedad entre el colectivo homosexual masculino ha ido ganando cada vez más peso entre los nuevos casos detectados hasta el punto de que los expertos la consideran ya "alarmante".
La directora de Salud Pública del Gobierno Vasco, Mertxe Estébez, el coordinador del Plan del Sida en Euskadi, Daniel Zulaika, el presidente del Consejo de Colegios de Farmacéuticos del País Vasco, Ángel Garai, y el presidente de las ONG vascas Antisida, Asier Lekuona, fueron los encargados de presentar ayer en una rueda de prensa en Donostia una nueva campaña institucional de prevención del VIH y la sífilis dirigida a hombres homosexuales.
Estébez aseguró que el 42% de las nuevas infecciones por VIH detectadas a lo largo del año pasado se dio entre varones homosexuales, lo cual, teniendo en cuenta que éstos representan más o menos al 2,5% de la población, constituye una incidencia "preocupante" entre este colectivo. Igualmente se produce este mismo fenómeno entre la comunidad gay con otras enfermedades de transmisión sexual, como pueden ser la sífilis y la gonococia.
En conjunto, el número de infecciones de transmisión sexual ha aumentado "espectacularmente" en Euskadi, ya que en los últimos cinco años (2007-2011) los nuevos casos de sífilis se han multiplicado por cinco respecto al quinquenio anterior al pasar de 45 a 284, mientras que los de gonococia han pasado de 155 a 551. En ambas enfermedades, el incremento afecta específicamente a los hombres homosexuales, ya que el 74% de los nuevos diagnósticos de sífilis y el 43% de los de gonococia detectados entre 2005 y 2011 en las consultas de Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) de Osakidetza correspondió a varones gays.
El hecho de que las nuevas generaciones no hayan conocido la epidemia del sida en sus años de mayor virulencia, que el VIH se haya cronificado o que se den nuevas formas de relación a través de Internet, pueden favorecer los contactos sexuales de riesgo y la propagación de una enfermedad que se detecta normalmente en personas que superan los 35 años. Una vez al año hazte la prueba del VIH y de la sífilis es el lema de la campaña lanzada ahora por el Gobierno Vasco para fomentar la detección precoz de una enfermedad que, según Estébez, en el caso del sida se diagnostica tarde en el 50% de los casos.
Este hecho tiene una doble consecuencia, ya que, por una parte, a nivel individual, las personas con diagnóstico tardío tienen peor pronóstico y, por otra, a nivel de salud pública, ya que los afectados pueden transmitir el virus sin saberlo.
Daniel Zulaika, por su parte, precisó que sólo los medicamentos antirretrovirales tienen un coste anual por paciente de 10.000 euros que, multiplicados por los 35 años que puede vivir un paciente diagnosticado a la edad habitual, implica más de 350.000 euros por persona.
El Gobierno Vasco distribuirá 5.000 kits que incluyen un preservativo, lubricantes y una tarjeta en la que aparecen todos los lugares en los que pueden hacerse las pruebas del VIH y de la sífilis: consultas anónimas de Osakidetza, 36 farmacias y 3 ONG. Las 36 farmacias vascas en las que se llevan a cabo estos test rápidos han realizado, desde marzo de 2009 hasta marzo de 2012, un total de 9.386 pruebas de VIH, en las que se han detectado 86 positivos, mientras que desde el año pasado han efectuado 100 de sífilis con 5 positivos.
Asier Lekuona solicitó ayer al Gobierno Vasco que continúe con estas campañas de detección, ya que en el momento en el que una persona se somete a una prueba de VIH piensa en la posibilidad real de sufrir la enfermedad y cambia a partir de entonces su conducta.
En cuanto al copago sanitario, la directora vasca de Salud Pública volvió a mostrar el rechazo del Ejecutivo autonómico hacia las medidas promovidas desde la Administración central, convencida de que pueden propiciar "reductos" de enfermedad en los "colectivos más desfavorecidos".