Vitoria. El Departamento de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Vitoria ha denegado a la Sociedad de Hidrocarburos de Euskadi, Shesa, la licencia de obra para perforar los dos pozos exploratorios de Subijana de Álava con los que el Gobierno Vasco quiere comprobar si la extracción de gas pizarra en Euskadi mediante la técnica del fracking es viable técnica y ambientalmente, y rentable desde el punto de vista económico.

Según la resolución y el informe técnico correspondiente, a los que ha tenido acceso DNA, el Ayuntamiento considera que "la documentación presentada no garantiza que no se vayan a provocar impactos inasumibles". Así, los especialistas en Medio Ambiente del Gobierno de Javier Maroto critican que la información aportada "no se ajusta al contenido mínimo" que exige la Ley General de Protección del Medio Ambiente del País Vasco, pues "contempla únicamente la obra civil, y sin embargo debería contemplar fundamentalmente la fase de perforación y exploración".

El Consistorio echa de menos en la documentación presentada decenas de analíticas y estudios, y detecta varias deficiencias formales. Destacan entre estos requerimientos el cómputo y procedencia del agua que se va a utilizar para estimular la roca, la identificación de los compuestos químicos y de los explosivos que se emplearán, o una "valoración detallada del riesgo que supone la posible contaminación de las aguas [...] por metano, radiactividad y metales pesados".

Se pide asimismo una cuantificación de los fluidos inyectables residuales recuperados del subsuelo, se reclama "una información más detallada" sobre los posibles efectos de los sondeos en el Lugar de Interés Común del Zadorra, y se establece que los caminos utilizados por los camiones se refuercen para impedir el arrastre de barros. El Consistorio solicita además que se valore el impacto que se generaría ante posibles escapes de metano, "ya que el efecto invernadero de este gas es más potente incluso que el del dióxido de carbono", punto sobre el que discrepan en el Departamento de Industria, promotor del proyecto del fracking. También se pide que se garantice el cumplimiento de la ordenanza de ruidos de 2010, y se exige un estudio "al detalle" del riesgo por contaminación de aguas subterráneas específico para el acuífero de Subijana. Deberá considerarse "el impacto que tienen los productos químicos utilizados sobre la salud humana", y se recuerda la cercanía de los pozos Enara 1 y 2, objeto de la petición de licencia de obras, con los Montes de Vitoria cuya catalogación como Parque Natural se tramita en la actualidad.

El Ayuntamiento entra aquí en una de la claves de la pugna administrativa entre el Gobierno Vasco y los agentes sociales y políticos opuestos fracking. Los técnicos municipales reclaman la documentación ambiental sobre el proyecto inicial del Gobierno, que incluía 16 pozos y que por entrar en áreas protegidas por la Red Natura 2000 exigía una evaluación de impacto ambiental que luego la Secretaría de Estado de Cambio Climático no pidió al reducir Industria el proyecto de exploración a los dos pozos de Subijana. La intención del Gobierno Vasco es ir tramitando nuevos sondeos exploratorios por separado si éstos son necesarios para comprobar la viabilidad del proyecto del fracking.

En el Ayuntamiento coinciden con los críticos a la fracturación hidráulica al denunciar que "la tramitación separada una a una de todos los pozos de exploración supone una forma de evitar la evaluación de impacto ambiental" exigida cuando el plan contemplaba 16 perforaciones. Por ello, los técnicos piden a Shesa que evalúe "detalladamente el efecto sinérgico y acumulativo que tiene el proyecto de perforación de estos dos pozos [...] con otras actuaciones proyectadas en el marco del mismo permiso de exploración".

Por otro lado, según el Ejecutivo de Patxi López, la resolución favorable a los dos pozos por parte del Gobierno central impide a Vitoria denegar el permiso medioambiental para explorarlos. En consecuencia, lo que hacen los técnicos es invocar el Plan de Ordenación Urbana de 2003 -en materia urbanística el Ayuntamiento sí tiene margen de maniobra-, que no permitiría extraer gas en la zona de Subijana, Área Forestal y de Valor Natural de Grado 2, en una eventual fase de explotación.

El Consistorio da un mes a Shesa para aportar la prolija documentación requerida, pues no cabe recurso ante la resolución, y transcurridos tres meses más declarará la caducidad del expediente y su archivo, lo que obligaría al Gobierno a empezar de cero.

Maroto respalda a los técnicos Ya ayer el alcalde, Javier Maroto, deslizó que la documentación presentada hasta la fecha por el Ejecutivo no es suficiente, y rompió una lanza por sus técnicos, sin cuyo visto bueno no firmará "ningún tipo de permiso". A día de hoy ese visto bueno no ha llegado, dijo Maroto, y sin él "no habrá fracking en Vitoria".

El proyecto del Departamento de Industria ha despertado la preocupación, no sólo entre los técnicos municipales, sino también entre los grupos políticos. Ayer Bildu se posicionó ante un cambio legal que dará vía libre la práctica del fracking en parques naturales, y que el PSE defiende como un mecanismo de defensa ante las empresas cantereras ajeno a la fractura hidráulica. La modificación "implica directamente a los Montes de Gasteiz", según la concejal abertzale Itziar Amestoy. La edil pidió la comparecencia del alcalde para que valore la propuesta de PSE y PP en el Parlamento aceptada por el Ejecutivo. También el portavoz del PNV, Gorka Urtaran, reclamó a Maroto que presione para evitar este cambio en la Ley de Conservación de la Naturaleza.